Señor director:
Leí la nota de la inauguración de la Escuela José Mármol. Quien escribe hoy, recuerda que en el año 1964, con la Intendencia de Vijande, se colocó la piedra fundamental en un acto al que concurrieron alumnos con sus padres, autoridades y quien escribe.
A posteriori, se iniciaron los trámites para la edificación de la escuela. Se llegaron a cavar unos pocos cimientos en el año 1971, que luego fueron cubiertos por las malezas y quedó postergada su edificación.
Con la llegada de Bercovich Rodríguez a la Gobernación y con el apoyo del doctor “Pepe” Martín Iglesias, secretario de Gobierno, quien les escribe inició los trámites siendo integrante de la Cooperadora del establecimiento con el apoyo de su directora Clelia Fernández y después de largas entrevistas con gobiernos de turno, en plena dictadura militar, no logramos más que promesas y gastar los escalones del Ministerio de Obras Públicas, ubicado en avenida Illia de la capital cordobesa.
Con la llegada del Gobierno Justicialista logramos una entrevista con la ministra de Educación Sacheta, por medio del doctor Iglesias, que en una cena de fin de curso de la Escuela del Trabajo, a la postre me recibió en la Dirección de la escuela y me concedió una audiencia en dicho Ministerio, solicitando también la presencia de su directora y otros integrantes de la Cooperadora donde se comprometió a edificar la escuela.
Pasado un tiempo el doctor Iglesias me acercó un bosquejo de la maqueta del edificio y me dijo, textuales palabras: “Van a tener una escuela de primera, con salón de actos, jardín de infantes casa para la portera y comedor escolar”. Es así como se concluyó el edificio y se prepararon los festejos para su inauguración, con la alegría de padres, alumnos vecinos y maestros, acto que fue frustrado por la llegada del golpe militar, quedando de esta manera suspendida dicha inauguración, que luego se realizó por el Gobierno militar, al cual fui invitada por medio de una tarjeta.
Dicho acto se realizó a puertas cerradas, contando con la presencia de la directora, maestras, el padre Gotardi y representantes militares.
Debo aclarar que mis hijos y nietos concurrieron a dicha escuela y fue un sueño que cumplí con amor y cariño.
Lydia Pérez de Giacomelli
DN 2.790.234