Una importante reunión, con el afán de mejorar las condiciones laborales de sus compañeros de la ciudad de Villa María, mantuvieron ayer referentes locales y provinciales del Sindicato de Peones de Taxi de Córdoba (Sipetaco) con Luis Rey, auditor General de Villa María.
A propósito de este encuentro, Fabián Estarás (referente local del sindicato) informó que “los compañeros de Córdoba vinieron en apoyo a nuestro pedido. Pretendemos que las 24 licencias para taxis que tiene la Municipalidad de Villa María sean otorgadas a los choferes. En base a eso hoy (por ayer) hemos mantenido una reunión con el auditor General de Villa María, Luis Rey, y en cierta forma nos fue bien, porque luego del encuentro él ha sugerido al Poder Ejecutivo que se tuviera en cuenta nuestro planteo. Lo primero que le pedimos es que esas licencias no tuvieran costo para los choferes y que nosotros tengamos prioridad en el otorgamiento de las mismas, que no sean para cualquiera que no esté dentro del sistema”.
“La ley indica que por cambio de titularidad de licencias para la explotación de automotores de alquiler se pagarán cincuenta mil pesos, pero en el caso que el municipio ya las tiene a esas licencias, que han vuelto, la situación no está reglamentada”, agregó.
Por su parte Hugo Cisterna, secretario General Adjunto de Sipetaco, fue tajante al afirmar que “desde nuestra experiencia y la conducción del sindicato en la ciudad de Córdoba, decimos que las licencias del municipio villamariense deben sortearse entre los choferes porque les pertenecen a ellos, no es que vienen de un titular a otro, sino que son nuevas licencias que van a pre-adjudicarse, y el canon que deben recibir es el que corresponderá por pago de aranceles, como paga cualquier actividad rentada ya sea al municipio o al Gobierno de la provincia”.
Considerablemente molesto por este panorama que atraviesan sus compañeros en la ciudad, Cisterna añadió que “el monto que quieren cobrarles a los choferes para acceder a dichas licencias, 50 mil pesos más el pedido de una unidad cero kilómetro para trabajar, creemos que es para coartarles la posibilidad de que puedan adjudicarlas. Si estamos hablando de personas que tienen un ingreso diario de 150 pesos no hay forma de que puedan conseguir la plata para pagar esas licencias. Están haciendo algo encubierto para que aquel inversionista que tiene dinero pueda comprar las licencias que se le ocurran con la plata que le sobra y dejar marginados a los choferes de forma permanente. Creemos que la mejor opción es el sorteo y sí creemos que deberán tener un plazo para incluir la unidad de trabajo requerida”.
Retomando su testimonio, Estarás confesó “no sabemos cuántos compañeros hay interesados en obtener esas licencias, porque seguramente desde que la Municipalidad les puso un precio tan alto no son muchos los que se han presentado a realizar el trámite”.
Finalmente el villamariense concluyó denunciando que “siguen surgiendo problemáticas que ya nos hemos cansado de explayar y denunciar, con actos discriminatorios que siguen sufriendo los choferes por parte de las empresas. El último caso es el del compañero Raúl Zoy, que no puede volver a trabajar por un pleito laboral que tuvo en el pasado con una reconocida empresa de taxis de la ciudad de Villa María”.