A través de un comunicado la central de Trabajadores regional Villa María “repudio enérgicamente la situación de zozobra que hoy están viviendo los trabajadores de la industria láctea Innovatech SA, ex Nestlé”.
“No se entiende que en el corazón de la cuenca lechera más importante de nuestro país estas empresas sigan jugando a la timba financiera, poniendo en juego las fuentes de trabajo y la paz social de las familias de cada trabajador”, agrega el texto.“Sabemos que poco les importa la realidad social de cada trabajador, sólo existen intereses económicos que se reflejan en la frialdad de un balance o en la posibilidad de un mejor y más rentable negocio”, indica a renglón seguido el manifiesto.
“Pero también sabemos que hay un Estado que debe asumir una fuerte posición frente a este trasvasamiento de identidades empresariales en donde los trabajadores ni siquiera saben quienes son sus patrones y que sólo se manejan por medio de funcionarios que no tienen capacidad para resolver el destino de la empresa y no lo hacen”, continúa diciendo el escrito elaborado por los sindicalistas.
“Hacemos un llamado a la reflexión a aquellos que hoy tienen en su poder la posibilidad de interceder ante la empresa e incluso definir políticas de producción”, agrega la misiva.
“Hay que terminar con ese estado de incertidumbre puesto sobre los trabajadores, deben garantizarse las fuentes de trabajo, deben hacerle entender a estos empresarios golondrinas que los derechos de los trabajadores se respetan y que no son un número puesto a producir, tienen derechos y los van a ejercer”, advierte la nota firmada por Jesús Chirino, José Luis Bernabé y Camilo Rodríguez.
“Frente a esta situación va nuestra solidaridad para acompañarlos en lo que sea: la defensa irrestricta de sus derechos como trabajador frente a una patronal despiadada que solamente piensa en la acumulación de riqueza para darle destino de timba como ocurre siempre con estos capitales golondrina”, dice el texto.
“Alguna vez las fuentes de producción de nuestro país deberán estar en manos de los trabajadores para garantizar un país más justo y equilibrado en la distribución de los recursos económicos”, concluye.