El Hospital Regional Pasteur y otros que se erigen en distintos lugares de la provincia comparten una problemática que impacta de manera directa en la calidad de los servicios que prestan. Sufren, en concreto, la falta de recursos humanos en áreas claves de atención. 

Como ejemplo en Villa María, puede señalarse que camilleros cumplen el rol extra de telefonistas o profesionales técnicos, que además de su labor suman la de atender al público y completar papeleos varios (el área de Bioquímica tiene sólo dos responsables). También, las asistentes sociales hacen las veces de administrativas y hasta los médicos de Guardia, además de atender a los pacientes, tienen que ocuparse ellos mismos de gestionar servicios que el Hospital no tiene .

En definitiva, los trabajadores, además de la función que les compete, deben cubrir los espacios vacíos de personal existentes en diversos sectores del nosocomio regional.

Como dato extra, en el Hospital villamariense, que cuenta actualmente con aproximadamente 400 trabajadores en su planta funcional (no se está cubriendo ninguna licencia del personal activo), en los últimos dos años se ha perdido una veintena de puestos laborales debido a que la Provincia no vuelve a cubrir las bajas que fueron ocurriendo.

La irregular situación ha sido denunciada ante la Dirección del centro asistencial y, por los directivos, canalizada al Ministerio de Salud provincial. El reclamo nunca tuvo eco a nivel ministerial.

Ayer, referentes de los trabajadores se reunieron en la sede central del Sindicato de Empleados Públicos (SEP), declarándose luego del plenario en estado de conflicto.

Como medidas de acción directa, los reunidos en plenario determinaron que mañana se realice una movilización con los cuerpos de delegados en la ciudad de Córdoba, mientras que a nivel local se realizarán asambleas de dos horas por turno (hasta el próximo lunes 24) y la adecuación de los servicios al número real de personal que cuenta cada Hospital.

 “Después de una lucha prolongada por la incorporación de gente y ante la negativa del Gobierno provincial se tomó la determinación de impulsar una serie de medidas”, indicaron los delegados  gremiales Leandro Parnisari y Sergio Galoni en diálogo con EL DIARIO.

“En el Pasteur, si adecuamos los servicios en cuanto a la gente que hay, se van a ver resentidos la Guardia central, laboratorios, el internado de adultos, Pediatría, Maternidad y Neonatología”, coincidieron Parnisari y Galoni.

“El Gobierno ha venido haciendo paritarias con el sindicato, prometiendo la incorporación de personal. Hasta el momento no ha puesto a nadie. Hemos llegado a un punto de colapso en todos los hospitales de la provincia”, enfatizaron.

“Desde el sindicato cuidamos la integridad física de los compañeros, si seguimos así (cumpliendo varias funciones a la vez), van a ser varios los que tengan que solicitar carpetas médicas por la alta demanda de atención que hay”, acotaron.

“El martes 25 los delegados nos volveremos a reunir y de no existir ninguna respuesta oficial, las medidas de fuerza se agudizarán”, concluyeron.