En la jornada de ayer se llevó a cabo el primer plenario de representantes de más de 30 localidades de las cuencas del río Ctalamochita en el Campus de la UNVM.
El objetivo final fue consensuar acciones tendientes a elaborar un proyecto de ley provincial que termine regulando el uso y la protección de las aguas.
Para ello se invitó a legisladores provinciales (como el caso de Luis Brouwer de Koning), a los concejales de nuestra ciudad y a expertos en materia ambiental.
Precisamente, los coordinadores de la jornada fueron el ingeniero agrónomo y docente de la UNC, Alberto Daghero, y la coordinadora de la carrera Ambiente y Energías Renovables de la UNVM, Marta Rodríguez.
La especialista recordó a los medios que dicha experiencia surgió como respuesta a una reunión realizada un mes y medio atrás con legisladores en la Comisión de Ambiente provincial.
Respecto a la importancia del encuentro, indicó que "muchos no entienden lo que es una cuenca o sólo trabajan desde su espacio o su municipio, sin tener en cuenta aguas arriba o aguas abajo. La intención es abordar a la cuenca en forma integral, teniendo en cuenta los problemas sociales, ambientales, económicos, de educación y de salud. También regular la implementación de nuevas industrias, el tratamiento de efluentes, comprender la biodiversidad y forestación. En cuanto a cada tramo de cuenca, en la alta es importante constatar el consumo y almacenamiento de recursos. En la media, regular la producción de tierras y el exceso de extracción de agua. Mientras que en la baja se debe trabajar en minimizar las inundaciones".
Deforestación y expansión
Por su parte, Daghero fue más punzante: "La deforestación y la expansión inmobiliaria hacia las sierras son espantosas. A este ritmo, y sin regulación, en cualquiera de las cuencas de Córdoba dentro de 40 ó 50 años no vamos a tener más agua".
Respecto a los controles necesarios, señaló como primordial "el manejo racional del agua, la regulación de efluentes industriales, la aplicación de agroquímicos y el uso sistematizado de los campos, dado que hay que tener en cuenta que se está produciendo soja en las mismas sierras. Incluso los suelos, que se usan para explotación inmobiliaria, y que deberían mantenerse como bosque nativo, perjudican e impactan el ambiente y las consecuencias las vemos agua abajo o a lo largo de los años".
En tal sentido, puntualizó que "no sólo falta cumplir las leyes, sino tomar conciencia, desde los dirigentes hasta la sociedad en su conjunto. Debemos lograr un compromiso ciudadano y político".
Por su parte, Brouwer de Koning, quien excusó al titular de la Comisión de Ambiente provincial Javier Pretto por estar en campaña, recordó a los participantes de la charla que “en 1991 se sancionó una ley para la regulación de la cuenca, pero no se ha cumplido realmente”. Del mismo modo, valoró el hecho de conformar un núcleo de localidades que puedan enfrentar a una empresa o industria que perjudique el ecosistema.