Ayer al mediodía, la filial Villa Nueva del Sindicato Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA) realizó una asamblea en la puerta de la planta de leche en polvo Santa Clara, ubicada sobre la avenida Carranza.
El motivo del encuentro fue, según denunciaron, la sucesión de despidos y suspensiones injustificadas.
"En los últimos siete meses, la empresa suspendió a cuatro compañeros y despidió a otros tres", dijo Fernando Páez, secretario general del gremio que representa al sector.
"No proceden como corresponde, advirtiendo los errores, haciendo apercibimientos o ese tipo de medidas, sino que directamente despiden o suspenden", agregó.
Destacó que cuando habla de "errores", se refiere a cuestiones laborales mínimas y comunes en cualquier ámbito. "Por ejemplo, uno de los despedidos es un chico que estaba trabajando con una balanza que había estado rota. El creía que estaba arreglada, pero pesaba 100 gramos más por bolsa. Obviamente que no lo advirtió y recibió la máxima sanción que puede caer sobre un trabajador: el telegrama de despido", indicó Páez.
"También advertimos, como hecho grave, que no están remplazando a los trabajadores que dejan cesantes, lo que también nos preocupa", dijo.
A Trabajo
En la asamblea de ayer, Páez informó a sus pares que llevarán la cuestión al Ministerio de Trabajo, donde tienen un expediente abierto por un tema similar. "Ahora, pediremos que se reabra el expediente para sentarnos con la empresa y exigir que cese esa actitud, dado que no hacen más que presionar y crear un mal clima de trabajo, con los muchachos atemorizados, porque saben que ante cualquier error, pueden perder el trabajo", concluyó.
La planta de Santa Clara está ubicada sobre la avenida Carranza y cuenta con unos 80 trabajadores del sector de la alimentación. Hacen leche en polvo y algunos derivados de suero.