El obispo de la Diócesis de Villa María encabezará hoy una misa de envío en la Iglesia Catedral, en la que se despedirá así a los peregrinos que viajarán a Brasil para participar de las jornadas mundiales que reunirán a jóvenes.
El secretario canciller del Obispado, padre Darío Barrera, confirmó ayer a EL DIARIO que la ceremonia religiosa se iniciará a las 17 en el templo mayor de la ciudad.
Será una misa “de las habituales” pero con el agregado de que el purpurado “da un envío en nombre de la Diócesis”.
Samuel Jofré Giraudo, el nuevo obispo, brindará una homilía.
La idea de la Iglesia Católica es que hoy converjan todos los que viajarán al país hermano.
Por eso, se estima una notable concurrencia no sólo de villamarienses sino de comunidades de la región, como parroquias, capillas o escuelas cuyos miembros viajarán para participar de las jornadas que presidirá el Sumo Pontífice, el argentino Francisco.
El sacerdote Gonzalo Riera, de esta Diócesis, estaba ayer ultimando detalles del contingente de esta zona que irá al evento.
Se conoce que viajarán varios curas de este territorio.
Entre ellos, se cuenta a villamarienses como Francisco Iglesias (que está en la Parroquia Sagrada Familia de barrio Mariano Moreno) y José Defagó. También, de la zona, serán de la partida los párrocos Pablo Alfonso, de La Playosa, Daniel Zanella, de Río Tercero, Marcos Dequino, de Etruria, Fabián Gili, de Leones y Fernando Malpiedi de Justiniano Posse.
Cabe consignar además que irán alumnos de dos colegios de Villa María y Villa Nueva: el Instituto San Antonio y el Instituto Inmaculada Concepción, respectivamente.
La Jornada Mundial de la Juventud (conocida bajo las siglas JMJ) es un evento organizado por la Iglesia Católica que convoca a los jóvenes de todo el mundo en torno a la figura del Papa.
Se realiza anualmente en cada Diócesis del mundo el día de Domingo de Ramos, con una ceremonia principal en el Vaticano. No obstante, cada dos o tres años, se realiza un gran encuentro internacional realizado en una ciudad sede. Esta ceremonia es presidida por el jefe de la Iglesia Católica. Este último encuentro, de varios días de duración, es el que se asocia habitualmente con el nombre de Jornada Mundial de la Juventud.
Esta iniciativa tuvo su origen en la idea del Papa Pablo VI, que en el Año Santo de 1975 reunió en Roma a varios miles de jóvenes en representación de numerosos países. En 1984 durante el papado de Juan Pablo II se realizó una nueva convocatoria mundial, para incentivar la participación juvenil en la Iglesia, llegando a reunir a más de cinco millones de personas durante la edición de 1995, realizada en Manila, Filipinas.
En 1997, dio un vuelco erigiéndose en un festival para la juventud con una duración de tres días antes de la ceremonia final. De allí en adelante se ha organizado sucesivamente en París, Roma, Toronto, Colonia, Sidney y Madrid.
La edición de 2013, que contará con un Papa argentino se celebrará en la ciudad de Río de Janeiro entre el 23 y 28 de este mes.