Escribe: NET
"En política sólo triunfa quien pone la vela donde sopla el aire; jamás quien pretende que sople el aire donde pone la vela”. La frase de Antonio Machado ha sido una constante en la carrera de ciertos dirigentes que han saboreado las mieles del poder en las últimas décadas colocando la vela de acuerdo a la dirección del viento.
Entre los caudillos que han usado “la astucia del zorro y la fuerza del león” (consejos de Maquiavelo) para permanecer en el sistema, superando los obstáculos, está el máximo referente del PJ provincial y actual gobernador de la provincia José Manuel de la Sota.
Los vientos de la renovación no lograron, aún, deteriorar su liderazgo en el peronismo cordobés, pero sí le pusieron fuertes rocas en el camino con perfume de mujer.
Las batallas más complejas que debe librar el Gallego, este año, están representadas por las damas, piezas claves en las partidas del ajedrez electoral.
La más poderosa de todas sus rivales, es sin duda la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Si bien el aire conservador de la provincia mediterránea no es saludable para el modelo propuesto por la Nación, las estrategias de la primera mandataria, a través de Unidos y Organizados, no dejan de ser una migraña para el PJ.
Cristina seleccionó con mucho cuidado los nombres de la lista que la representará en estas tierras y no dejó flancos para los disparos.
La postulante principal es una mujer Carolina Scotto que supo estar entre las preferencias de José Manuel de la Sota a la hora de elegir una compañera de fórmula en 2011.
El nombre de la exrectora de la Universidad Nacional de Córdoba sonó, en la previa a los comicios de gobernador de 2011, pero ella misma negó su interés por abandonar los claustros y dedicarse a la política.
La candidata del Frente para la Victoria que tuvo el honor de ser la primera mujer en conducir la universidad más antigua del país tiene una trayectoria que no presenta puntos débiles para ser usados en una campaña agresiva.
Directa, enérgica y comprometida con el proyecto de Cristina, Scotto dejó dos conceptos claros en su paso por la Villa: el peronismo es la base del kirchnerismo junto con las organizaciones sociales y no le interesa entrar en enfrentamientos.
Un discurso similar al usado por su compañero en la boleta: el villamariense Martín Gill.
Villa María es una fuente importante en el entramado de José Manuel de la Sota. Una fuente necesaria para equilibrar sus problemas con el electorado cordobés que lo ha tenido de mal en peor en las elecciones de los últimos seis años.
Pero, las damas se mueven por los casilleros sin dar tregua. Cristina ha jugado fuerte en Villa María eligiendo a Gill con chances de llegar al Congreso.
Las últimas movidas no pueden ser, ni son, subestimadas por los delasotistas: el respaldo del intendente Eduardo Accastello, la inauguración del laboratorio de la UNVM con la videoconferencia de Cristina y la presencia de Carlos Zannini en la fiesta de los cien años del Centro Empleados de Comercio. El PJ cordobés tiene en el centro del país una posición complicada en el tablero. El grueso del peronismo sigue respondiendo a Accastello y otra mujer que maneja el terreno con destreza: Nora Bedano.
Pero el zorro sabe por zorro, pero más sabe por viejo dice el dicho. Y De la Sota ya prepara con mucho bombo su desembarco en la ciudad el 19 de julio.
En bambalinas anda su fiel legislador Darío Ranco para llenar el Rivadavia y dar una demostración de fuerza.
Los que gustan de tirar rumores afirman, a quien quiera prestarles el oído, que el Gallego hará anuncios importantes para Villa María y que tiene pensado inaugurar el nuevo Hospital antes de las elecciones de octubre.
En las filas delasotistas también se extiende la consigna de “no confrontar ni descalificar a los compañeros”. Uno nunca sabe para qué lado soplará el viento y es indispensable que la vela no se apague.
De la Sota, interesado en ser candidato a presidente de la Nación, no puede resignar votos en las legislativas.
Con el peronismo tan dividido, su misión es captar el interés de la mayor parte del electorado anti K.
Y para ello, deberá apuntalar su posición de opositor al modelo nacional con mayor fuerza. Una cuestión que todavía no tiene resuelta, ya que la condición de “víctima” no es suficiente para generar confianza en los ciudadanos que intentarán, en las urnas, recortar el poder de la presidenta.
Cosecharás tu siembra
En Córdoba capital, el tablero peronista también tiene la influencia de la dama. Fruto de la propia siembra, fue su esposa y uno de sus soldados más leales, la experimentada dirigente Olga Riutort le sacará un pedazo de la porción del justicialismo.
La actual concejala rechazó la oferta de acompañar a Juan Schiaretti (ver página 10) y decidió dar la pelea en el campo que mejor conoce: las bases capitalinas.
Olga es bien vista en las filas del kirchnerismo y si llega a una banca no será una oposición sin razonamiento previo.
La dirigente se rodeó de nombres del interior y su segundo es nada más ni nada menos que uno de los intendentes afines a Accastello: Daniel Delbono.
La complicada situación del peronismo cordobés, que está primero en las encuestas aclaramos, se presenta en San Francisco con el desafiante Martín Llaryora que jugará en la interna de las primarias.
Pero, volviendo a la frase del principio y más allá de las especulaciones De la Sota trabajará sin pausa para que la vela siga encendida.
La frase
“Nuestra elección gira en torno de un equipo de gente honorable como candidatos y del protagonismo de nuestra militancia. Ese es nuestro gran capital y, en sí mismo, nuestro más emocionante desafío. Todos van a poner el alma en esta campaña” (Luis Juez)