Nublado y lluvioso. Así amaneció el 9 de Julio en Bell Ville, ciudad elegida por el Gobierno de Córdoba para hacer la celebración central por el 197mo. aniversario de la declaración de la Independencia.
El clima motivó que los organizadores suspendieran la participación de los alumnos de las escuelas de la ciudad del Departamento Unión, como así también la de otras organizaciones intermedias.
Pero igual, con el Gabinete casi en pleno, se llevó a cabo el acto conmemorando la Independencia.
Sin discursos, la vicegobernador Alicia Pregno presidió la celebración, debido a que el gobernador José Manuel de la Sota “está en reposo por prescripción médica, debido a las molestias en su pie”, informó la funcionaria.
Asegura que mañana, ya estará en actividad y con alta médica.
“Habló varias veces esta mañana”, dijo un emocionado intendente Nelson Ipérico, al referirse a la comunicación telefónica que tuvo con De la Sota. Asegura que le dijo: “Hagan el desfile aunque sea con lluvia. En el año 2007 lo hicimos con nieve en Carlos Paz”.
Sobre la organización, el mandatario bellvillense destacó que para su sorpresa, los vecinos participaron colmando las aceras de varias cuadras de la avenida Córdoba. “Pensamos que por el frío no iba a venir tanta gente”, puntualizó.
El desfile
A poco de las 11 de la mañana, iniciaron el acto por la Independencia.
Subida a un vehículo militar, llegó la vicegobernadora y el intendente de Bell Ville, para dar inicio al desfile.
Abrieron el paso los veteranos de Malvinas, entre los que estaban excombatientes de varias localidades de la región, entre ellas, Villa María.
La música estuvo a cargo de cuatro bandas: la de la Policía de Córdoba, la de la Aviación, la del Servicio Penitenciario y la Boquerón, integrada por paracaídistas.
Tras el paso de los veteranos, siguieron los integrantes del regimiento de Patricios de Buenos Aires y un cuerpo especial de Granaderos que integra la escolta presidencial.
Le siguieron los integrantes de la fuerza aérea, los granaderos, el regimiento de infantería de montaña, los paracaidistas, la Policía Federal y Provincial y los Bomberos.
Llamó la atención por su vestimenta histórica la guardia de los Federales de Bustos, con miembros que custodiaban el palco oficial munidos de lanza de caña, como eran las armas de las luchas entre federales y unitarios.
También sorprendió el grupo del Regimiento de Caballería Martín Miguel de Güemes, munidos de sus gorros rojos y la vestimenta típica que usaron en las batallas para defender la frontera norte del territorio.
Cerraron con vehículos de las fuerzas y agrupaciones gauchas.
Tras el desfile, los ministros de Gobierno, las autoridades municipales y militares, compartieron un loco en el club Bell, cerrando el acto central de la provincia por el Día de la Independencia.