“Villa María es una ciudad que vive en paz”.
Esto afirmó ayer, durante el tedeum, el obispo diocesano Samuel Jofré Giraudo, al encabezar la ceremonia religiosa en la Iglesia Catedral a la que asistió el intendente Eduardo Accastello.
En el templo católico mayor de la localidad, Jofré dio su primer tedeum del 9 de Julio.
Recordó que desde el inicio de la Patria “la Iglesia estuvo ligada a la misma”, por lo que “tiene significación reunirnos aquí”. Rezó para que “Dios ilumine a todos para seguir construyendo una Patria libre, con amor, fraternidad y oportunidades para todos”.
El pastor rememoró los tiempos de la Independencia argentina y destacó que en el Congreso de Tucumán “doce de los 33 diputados eran sacerdotes”, recordando puntualmente al “venerable Fray Mamerto Esquiú”.
Accastello y numerosas autoridades de la ciudad ocuparon las primeras filas de los asientos del templo de calle Estados Unidos tras un acto protocolar que se realizó bajo un cielo gris y en la plaza San Martín, momentos antes. A ese espacio verde también concurrió el flamante obispo.
Allí se efectuó el izamiento de la Bandera nacional y se entonó el Himno, luego de lo cual las autoridades depositaron una ofrenda floral en el monumento al General San Martín.
“Los villamarienses estamos felices porque creemos que una vez más el 9 de Julio nos encuentra unidos y trabajando juntos, sorteando dificultades para vincularnos cada vez más desde la solidaridad, el encuentro y la justicia social”, expresó Accastello en el acto protocolar.
Tras recordar que la ciudad fuera capital de Argentina, el intendente sostuvo que hoy es “capital de una vida mejor, del encuentro, de gente que vive en paz y en armonía”. “Somos una comunidad que se desarrolla, se potencia y se realiza”, aseveró el jefe comunal.
“Aquel 9 de Julio de 1816, los argentinos se juntaron para priorizar un objetivo superior y determinar el comienzo de una nueva etapa emancipadora en el país”, destacó.
El titular del DEM indicó que “hoy 9 de Julio en Villa María celebramos una vez más el compromiso de vivir con solidaridad, pensando en que la mano extendida hacia el otro es tan importante como pensarse a sí mismo, en el amor al prójimo para conseguir el desarrollo y la equidad humana”.
Luego advirtió: “Todos tenemos el compromiso y la responsabilidad de trabajar juntos para aquellos que todavía no han encontrado las alternativas de las soluciones personales. Si trabajamos juntos hacemos que el espíritu del 9 de Julio perdure”.
En el acto protocolar fueron de la partida funcionarios del Ejecutivo, concejales, la diputada Nora Bedano, la intendenta y viceintendenta de los niños (Araceli Fantino y Victoria Aquistapace), el juez Ramón Rebak, bomberos, veteranos de guerra y dirigentes de otras fuerzas vivas de la ciudad.