Escribe: Horacio Marco

El rugby de la ciudad y especialmente del interior, ahora se ve imposibilitado de participar en la máxima competencia del país, como es el tradicional torneo Nacional de Clubes Campeones.
Jockey Club Villa María había adquirido ese derecho con absoluta legitimidad porque se clasificó subcampeón 2008 de la Unión Cordobesa, al igual que otros clubes sin demasiada historia en el rugby nacional.
Esto, al parecer molestó a muchos dirigentes catalogados como “popes”, debido a que al no estar en esa competencia “los grandes” como son Tala de Córdoba, Duendes de Rosario, Maristas de Mendoza, el torneo “perdería jerarquía y marketing”. Sólo por esa razón habría sido anulada la edición 2009, que sí había sido programada años anteriores cuando estuvieron dichos conjuntos.
Una vez más, el tan mentado “Federalismo” es dejado de lado y en un país donde se busca reestructurar todo por el prestigio adquirido por Los Pumas en el concierto internacional y por las posibilidades de competir con las grandes potencias, para generar un profesionalismo con jugadores que puedan formar parte del proceso de selección.
Pero, se olvidan algunos dirigentes que existen en el interior equipos que aún son amateurs y que con el aporte diario de sus entrenadores, jugadores, directivos y padres se intenta crecer para llegar a torneos superiores y, cuando ese objetivo se consigue, los derechos les son cercenados y las obligaciones no son cumplidas. ¿Hasta cuándo señores?