La Justicia local condenó ayer por enésima vez al archiconocido delincuente villanovense Miguel Román Unanue, alias “Vasco”, y le impuso una pena que lo dejará en la cárcel hasta fines de 2014.
Unanue, de 60 años de edad, pasó casi la mitad de su vida privado de la libertad, siempre por haber cometido delitos contra la propiedad, y ostenta el triste récord de ser el presidiario de Villa María y una amplia región del sur cordobés con mayor cantidad de sentencias en su prontuario.
En la víspera, al sentarse por 14ª vez en el banquillo de los acusados, confesó haber perpetrado un robo domiciliario en horas de la tarde del domingo 21 de abril pasado, luego de ingresar a una vivienda ubicada en Antonio Sobral 476, propiedad de una familia de apellido Fabro.
Tras romper el vidrio de la ventana del frente, Unanue provocó un gran desorden en el interior del inmueble y se apoderó de varias medallas y cadenas que ocultó en un bolso en el que llevaba una barreta y un destornillador, pero fue detenido por la Policía pocos minutos después que lo sorprendiera uno de los moradores y se diera raudamente a la fuga, aunque sin éxito.
Prisión efectiva
Por este nuevo episodio delictivo, el convicto multirreincidente recibió una sanción penal de un año y nueve meses de prisión de cumplimiento efectivo, al cabo de un juicio abreviado en el que fue declarado autor responsable de “robo” y “violación de domicilio”.
Si bien podrá solicitar el beneficio de la “libertad asistida” cuando le falten seis meses para el cumplimiento total de la pena, es probable que se le deniegue la excarcelación y tenga que purgar toda la condena, por lo que saldría en vísperas de la Navidad del año venidero.
La audiencia de debate fue presidida por la camarista Silvia Saslavsky de Camandone y contó con la participación del fiscal Francisco Márquez y de la defensora oficial Silvina Muñoz, mientras que el secretario actuante fue Roberto Jue.
Antecedentes
Entre mediados de 1971, cuando tenía 19 años y recibió su primera condena, y marzo de 2005, cuando se le impuso la penúltima, Unanue fue sancionado en 12 oportunidades.
En diciembre de 2010, en la que parecía iba a ser su 13ª condena, el número de la “yeta” terminó siendo el de la buena suerte, si es que a esa altura de los acontecimientos podía decirse que el “Vasco” sea un tipo aventurado.
Lo cierto es que en aquella ocasión Unanue fue absuelto de culpa y cargo, luego de pasar más de 400 días “a la sombra”, acusado de haber intervenido en un asalto a mano armada a una carnicería ubicada en bulevar Sarmiento y 9 de Julio.
Ocurre que en 2005 había recibido una pena de tres años y seis meses de prisión por “tentativa de robo calificado” por uso de arma, “encubrimiento”, “resistencia a la autoridad” y “lesiones leves”, pero como se trataba de su séptima declaración de reincidencia, le aplicaron de manera efectiva la accesoria legal descripta por el artículo 52 del Código Penal de la Nación, que prevé la “reclusión por tiempo indeterminado”.
De esa manera, Unanue debía cumplir 13 años y medio entre rejas. Sin embargo, el abogado Antonio Alarcos, que por entonces ejercía su Defensa, interpuso un recurso de revisión del fallo y el Tribunal Superior de Justicia declaró la inconstitucionalidad del polémico artículo 52 por primera vez en la historia judicial de la provincia.
Salió... y entró
El “Vasco” recuperó la libertad en noviembre de 2007, pero en marzo del año siguiente fue detenido otra vez, ahora por “tenencia de cocaína”. Estuvo en la cárcel ocho meses, ya que en noviembre de ese mismo 2008 la Justicia Federal lo sobreseyó y ordenó su libertad.
Volvió a ser apresado el 9 de noviembre de 2009 por el asalto a la Carnicería Callegaris, aunque terminó siendo absuelto 13 meses y medio más tarde.
Al ser detenido en su casa de Comercio 1539, en Villa Nueva, la Policía también le secuestró dos envoltorios con picadura de marihuana, por lo que paralelamente al proceso que se le inició por aquel asalto, en el Juzgado Federal villamariense se tramitó una causa por infracción a la denominada “ley de drogas”.
A mediados de 2010, el exjuez Mario Garzón dictó el sobreseimiento de Unanue, pero continuó en la cárcel a la espera de ser juzgado por el asalto a la carnicería.
¡Otra vez sopa!
El 12 de agosto de 2011 el “Vasco” volvió a ser detenido cuando circulaba en un Volkswagen Gol por las inmediaciones de los bulevares Vélez Sarsfield e Italia, en compañía del también convicto reincidente Cristian Nicolás Cavallari, apodado “Mapache”.
Cuando la Policía requisó el vehículo, secuestró un revólver calibre 38 sin marca visible y otro calibre 32, marca Bagual, ambos cargados y con balas en la recámara.
Poco después Cavallari declaró que ambas armas eran suyas y “despegó” a Unanue de la causa, por lo que fue sobreseído algunas semanas más tarde y zafó, por segunda vez en menos de un año, de la que hubiera sido la 13ª condena.
Pero esa “suerte” se terminó ayer, cuando la Justicia local terminó imponiéndole la pena antes descripta por el robo a la familia Fabro.