Creo en la palabra, en la opinión, en la capacidad del hombre de preguntarse por la verdad de las cosas, de pensar y razonar y cuestionar el orden establecido por los gobiernos de turno. Creo en la educación pública y en la formación del pensamiento crítico. Y, aun creo en la seudo democracia que a duras penas nos deja espacios para ser libres.
Me pregunto si es ésta la ciudad que los votantes pretendían, o si las luces y los fuegos y el show están cegando a parte de la ciudadanía local. Después de tantos años de Gobierno del patriarcado “Accastello=Bedano=Accastello” ya no caben en mí las dudas sobre qué tipo de ciudad nos ofrecen. Nos ofrecen una ciudad de obras millonarias y monumentales, los planes de Gobierno en este caso no se andan con pequeñeces ni con un equilibrado uso de los fondos públicos.
Me pregunto si es humano desatender los comedores infantiles, las escuelas, el Hospital y los barrios; ¡todo en nombre de la estética!
Me pregunto si el subnivel, la medioteca, la costanera, las cámaras de seguridad que la Policía instalará por doquier, los reflectores haciéndoles burla a la crisis energética y los miles de fuegos artificiales junto al show y la farándula son las cosas que realmente nos hacen crecer como ciudad.
Me pregunto si esto resuelve nuestros problemas cotidianos, si gracias a estas "inversiones" tendremos un futuro mejor, si así logramos una mejor educación para nuestros hijos, si de esta forma podemos enfermarnos y contar con una mejor atención en nuestro precario Hospital, si es que ahora ya no se inundan nuestros barrios, si las luces sólo se encienden para el show o llegaran aquí al fondo y a los costados de la ciudad.
¿Cuál será la respuesta?, ¿cómo pagamos los medicamentos?, ¿la prepaga?, ¿la escuela?, ¿los servicios?, ¿cómo hacemos para enfrentar los aumentos en el servicio público de transporte?, ¿y los aumentos del agua?, ¿el de los impuestos?
¿Esta es la ciudad que crece? ¿quién crece realmente?, ¿a costa de qué crece?, ¿de qué modo vuelven al pueblo los millones invertidos?
Las preguntas son esenciales para cada persona, pregúntense ustedes también queridos conciudadanos, nunca dejen de preguntar.
Las respuestas las encontrarán en los hechos, en las "grandes prioridades" de nuestro Gobierno, en las necesidades de un pueblo y en el destino de los fondos del pueblo.
Pero si se siente desanimado porque en su casa o en su barrio la opulencia no existe y las preocupaciones crecen con las deudas, no desespere, salga a pasear... que allí donde fueron los fondos del pueblo, la opulencia es real, y no falta el agua ni las luces y el show hace que olvide la realidad cotidiana.

Nadia Caronni
30507572