"Todavía no lo podemos creer. Cuando nos enteramos que habíamos ganado, mi hermano se largó a llorar, después Lucas y por último yo, que subí al final porque todos venían a saludar. Arriba del escenario nos abrazó Narda Lepes, quien nos entregó el premio, y también se emocionó", contó a EL DIARIO Bruno Sícoli, aún embargado por la grata noticia.
Junto a Agustín Sícoli, de Dekura Bistró, y el maestro pastelero Lucas Ríos, de la Escuela Capacitar, conformaron el tridente villamariense que por primera vez se alza con el máximo galardón en el certamen provincial de gastronomía Córdoba Cocina 2013. El evento se llevó a cabo el miércoles pasado en el Hotel Quorum en la capital provincial, con la asistencia de 18 equipos de primer nivel. Los chefs de nuestra ciudad llegaron a destronar nada menos que al Sheraton Córdoba Hotel, que quedó en segundo puesto; secundado por La torgnole gastronomique de Ascochinga en tercer lugar; la empresa Vizno en cuarto puesto y Gran Vadori en quinto lugar.
"Nosotros -confesó Sícoli- esperábamos llegar como mucho a un tercer puesto, pero nunca al primero porque competíamos con monstruos que llegaban con containers industriales y elementos de última generación. Allá llegamos con unas chaquetas que nos quedaban grandes -que terminaron todas manchadas- y la materia prima en conservadoras de hielo, la que rogábamos que no se descompusiera en el viaje".
Según el jurado, integrado por expertos como Omar Piedrabuena (presidente del concurso), Lucas Galán (director de la escuela Azafrán), Guillermo Buzquiazo (exchef del Hotel Sheraton Pilar) y Tomás Sánchez (de la Academia Profesional de Cocina y Pastelería), la distinción fue asignada por "la calidad de los tres platos, su sabor y estética". El premio consistió en un monto aproximado de 10 mil pesos en materia prima y elementos y el pase al certamen nacional que se realizará en setiembre, en el marco de la feria Hotelga, en el predio de La Rural en Capital Federal.
Con ocho ensayos previos y sólo una prueba con el trío completo, desarrollaron en el certamen los tres platos (entrada, principal y postre) "con actitud y la mayor precisión posible, ya que trabajás contrarreloj", comentó Sícoli. Los platos fueron terrine a los cuatro quesos rellena con corazón de portobellos junto a geleé de vino torrontés, más un crocante de queso con huevo de codorniz a la plancha. El plato fuerte fue lomo de ternera en farce (relleno) de morcilla y ave sobre su jugo, papa rellena y mil hojas de vegetales y flanes de arvejas y coliflores. De postre, marquise de chocolate semiamargo con un cremoso de dulce de leche y chocolate blanco y una babá (pastel de masa leudada) con frutos rojos.