"¿Quién dijo que todo está perdido? Yo vengo a ofrecer mi corazón...". La estrofa de la canción de Fito sonaba alrededor de Marcelo Santoni cuando el martes se dirigía a la cita: el dirigente de Alumni, Gabriel López, lo había llamado para hablar.
La ilusión del talentoso ex jugador del club era una... sólo una: ser el técnico del Alumnito. Tras el encuentro, no hubo bronca. Hubo dolor.
"Había hablado con el ‘Coco’ Agüero y le expresé mi intención de volver al club después de siete años para dirigir al Alumnito. Me dijo que si por él fuera no había problemas pero me pidió que también hablara con los otros dirigentes", comenzó la charla con EL DIARIO el ex técnico de Unión Central, club donde hizo sus primeras armas como entrenador.
"Entonces -continuó- también se lo dije al 'Panadero' (por López) y me pidió unos días. Ayer (por el martes) me llamó y me comunicó que un grupo de dirigentes había elegido al 'Hormiga' Perossi en lugar mío."
"Me dolió mucho, porque tanto me dio el club a mí como yo le he dado al club y ésta era una gran oportunidad para volver", se confesó Santoni.
"Con el 'Hormiga' (por Amadeo Perossi) no tengo nada en contra, lo estimo mucho, pero si alguno de los dos hizo méritos para dirigir en Alumni, es obvio que soy yo", agregó.
Y fiel a sus expresiones "sin paracaídas", Santoni retrucó: "Pero, se nota que hay dirigentes que no son hinchas de Alumni y que no me quieren".
Seguramente, si para Santoni todo está perdido, él seguirá ofreciendo su corazón. Porque una esperanza sobrevuela aún en su cabeza. Será nada más que hasta el lunes, cuando la cuestión se resuelva definitivamente y su nombre seguirá sonando junto al de Perossi. "Voy a esperar... yo siempre espero a Alumni...".