Escribe: Pablo Luna Broggi
El comienzo del Torneo Clausura de Primera división de la Liga Villamariense de Fútbol “Bombero Comisario Jorge Mulinetti” no fue el más auspicioso en el nuevo fortín.
El predio “fortinero” fue el escenario de uno de los peores partidos de la jornada, no sólo por la falta de fútbol de los dos equipos, sino por el excesivo viento que levantaba mucha tierra en todo el campo de juego y hacía casi imposible la práctica deportiva.
Quizás el factor climático potenció la apatía de ambos planteles para atacar o al menos tomar el protagonismo del partido.
Alumni fue el primero en llevar peligro al arco rival mediante dos tiros libres de Daniel Ramírez que Simón Mellano atenazó sin problemas. Universitario tuvo una chance clara antes, sin embargo Iñigo trastabilló solo cuando se disponía a enfrentar a Serena.
Luego, el equipo fortinero continuó insinuando por intermedio de una de sus figuras, Nicolás Rey. Primero el 10 albirrojo avisó con un tiro libre que pasó cerca de la portería universitaria y luego, a través de un desborde en el cual dejó en ridícula a la defensa visitante, pero culminó con un defectuoso centro.
Todo era del local, sin embargo, en una jugada aislada luego de un lateral, el goleador Paolo Ostiatti tomó el balón, giró repentinamente y clavó un zurdazo rasante que Serena no pudo detener y Universitario se puso en ventaja.
El primer tiempo culminó con una injusta ventaja visitante y con un árbitro que no lograba tomar las riendas definitivas del partido. Este, por momentos “se le iba de las manos” por no saber medir de la misma manera infracciones del mismo tenor.
Las faltas fortineros eran amonestaciones, mientras que para los visitantes correspondían advertencias.
El complemento mostró la misma falta de fútbol que el primer tiempo. Recién a los nueve minutos vino la primera llegada de peligro que marcó el empate albirrojo. Daniel Ramírez envió un centro, Gustavo Reyes se la llevó por delante, descolocó a Mellano y venció su propia valla, decretando la igualdad final.
Universitario había logrado la ventaja sin merecerlo y ahora le empataban el partido de manera fortuita. La falta de inteligencia por parte de los dirigidos por Joselito Bernardó fue quizás el factor preponderante por el cual llegó el gol local.
El cimbronazo que provocó el tanto fortinero en el visitante hizo que Universitario recién volviera a llegar con peligro 20 minutos después cuando el experimentado Jacobi malogró una chance clarísima de marcar el 2 a 1, al rematar desviado casi debajo del arco.
A cinco del final fue Alumni quien casi se lleva el partido, cuando Picotti despejó el balón en la línea cuando éste ya había superado la resistencia de Mellano. No obstante, el lateral Universitario casi se convierte en el héroe de la jornada, ya que en la jugada posterior estrelló un fortísimo remate de cabeza en el travesaño.
El partido culminó con un justo empate, más allá de que los goles estuvieron de más. Ninguno de los dos equipos no sólo no hizo lo suficiente para llevarse el triunfo (Universitario estuvo más cerca), sino que tampoco merecían marcar.
Los locales, dirigidos ahora por Carlos Bonaveri, rescataron un valioso empate que les permite encarar de una mejor forma este nuevo semestre. En tanto, el visitante deberá mejorar a la hora de cerrar los partidos, porque si quiere revertir lo mostrado en el campeonato anterior, estos puntos no se le pueden escapar.
El árbitro
Pablo Juno tuvo una actuación regular. Mostró excesivas amonestaciones para el local y no midió de la misma manera las infracciones cometidas por los jugadores universitarios.
La figura
Nicolás Rey y Daniel Ramírez comandaron las acciones de juego del “Fortinero”. En el visitante se destacaron Paolo Ostiatti y Valentín Carrara.