En el Centro de Integración Social de Villa María ya se abordan 30 casos de adicciones, según confirmó ayer a EL DIARIO su jefa, Rosa Cámpora. Indicó que pertenecen a distintas edades y extractos sociales y que “llegaron de manera espontánea”. Apuntó que sólo se recibieron dos casos “extremos”. “Cuando hay un alto grado de consumo derivamos, porque nosotros no hacemos la práctica intensiva sino el diagnóstico. Se derivan a Casa Nazareth o tramitamos otros lugares mediante becas del Sedronar”, indicó la funcionaria al recibir a este diario en la sede de barrio Santa Ana.
Precisó que atienden a los vecinos de 7 a 14 horas y los viernes después de las 14, cuando hacen terapia en grupo.
En cuanto a violencia familiar, otro de los asuntos que se abordan desde el CIS inaugurado este año, especificó que se está trabajando con las dos personas que recibieron el botón antipánico.
En estas primeras instancias de este centro, se hizo hincapié en la capacitación. Ayer estaba concluyendo una especialización a docentes de Nivel Medio. Cámpora explicó que se dieron cuatro capacitaciones a equipos de municipios de todo el Departamento San Martín y otras cuatro a docentes de secundarios públicos y privados (casi 120 personas).
Develó que desde instituciones de Nivel Primario también les pidieron estas jornadas, por lo que evaluarán realizarlas en 2014.
“Los docentes plantean que en las aulas enfrentan situaciones ante las que no saben cómo actuar”, señaló. Y recalcó que nadie resolverá el problema sin el respaldo de la familia de quien sufre adicciones. En este sentido, contó que la mayor parte de quienes llegaron al CIS tienen el apoyo de sus padres.
El centro, como se conoce, es un servicio del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia previsto para dar respuestas a familias que buscan apoyo y acompañamiento para superar situaciones complejas de salud, de carácter social y económico.