En una interesante y accesible disertación sobre las variables que componen la dinámica económica de la hora actual y de años recientes en nuestro país, el economista Lucas Pusetto logró motivar la atención con actitud partícipe del numeroso público, estudiantes y profesionales que asistieron a la reunión formativa.
La exposición estuvo promovida por el Centro Comercial e Industrial, con el apoyo de la Federación Comercial de Córdoba y del IDEC, quienes facilitan este tipo de encuentros en diversas localidades del territorio provincial. En primer término, Pusetto distinguió las diferencias existentes entre el período institucional 2003-2007 con relación a los resultados económicos de la etapa 2008-2011, extendiendo sus consideraciones a la hora presente. Indicó que los números relativos al ciclo total (2003-2011) “son buenos”, con una tasa inflacionaria de aproximadamente el 14,4% en promedio y por dichos años; más el superávit comercial, con un desempleo estimado en un 10,3% para esos ocho años.
Posteriormente fijó su posición crítica sobre la temática relativa a la coyuntura actual y su proyección futura, dando implicancia al nivel inflacionario y a las dificultosas posibilidades de inversión que generan los componentes indicados. Acotó “que la economía se comportó en forma totalmente distinta entre los períodos 2003-2007 y 2007-2011 en adelante; siendo el primero altamente positivo en crecimiento, nunca por debajo del 8,5% que es una barbaridad, mientras que en 2008 crecimos poco, en 2009 tuvimos una recesión, en 2010 repuntamos y en 2011 otra vez para abajo”. Analizó “que hasta 2008 el Gobierno tuvo más ingresos que lo que gastó, pero en 2011 el déficit fiscal alcanzó a los 30.664 millones de pesos”.
El disertante aludió luego al nivel de desempleo, sosteniendo “que la tasa en 2003 era bastante alta, luego logra bajar y posteriormente se asienta en un 7% aproximadamente, pero no puede disminuir ese porcentaje; además teniendo en cuenta que para el Gobierno quien recibe un plan Jefes y Jefas de Hogar no es desempleado”. En lo relativo a uno de los factores más importantes destacó “que Argentina prácticamente no tenía inflación hasta 2007, desde allí empieza a aumentar y casualmente aquí deciden intervenir al INDEC para modificar la forma en que se leen los índices inflacionarios” dando a entender que posteriormente dichos componentes no son en su número objetivo los que publica el organismo oficial.
“Teniendo en cuenta dichos factores analizados y su implicancia en el sistema económico”, abordó el profesional las “dificultades para conseguir inversiones de significación”. “En 2012 no crecimos absolutamente nada, en lo que va del primer semestre del año 2013 crecimos un 2,8%; pero este dato no es para festejar porque se basa en el desarrollo de sólo dos cosas: el agro y la producción de autos, si yo quito estos dos aspectos no crecimos nada”, subrayó. “Si bien parece que la economía está reactivándose, ni ustedes ni yo lo estamos experimentando”.
“Estanflación”
Luego destacó que los efectos de la inflación generan demandas (por defensa del valor adquisitivo), pero “no favorecen las inversiones”; conceptuó que el problema actual no es la suba del dólar (ni el “blu”) sino la inflación, que está convirtiéndose en estructural, “como planchada en un 25% anual” (comprendiendo básicamente precios y salarios) e independiente de lo que ocurra con los demás componentes de la economía. Pusetto definió al panorama actual como de “estanflación”: “Vale decir la combinación de estancamiento con alta inflación y ese es el peor escenario posible sobre el que puede funcionar la economía”. Precisamente, “Argentina y Venezuela tuvieron en 2012 los índices de inflación más altos, superando a Pakistán, India y Vietnam, con todos los demás países en índices menores al 10%”.
“En Argentina (y debido a sus reiterados antecedentes) la inflación es un problema de índole psicológica; si nos apoyamos en la idea que no va a bajar del 25%, es muy difícil cambiar la situación”. En la perspectiva futura, afirmó que difícilmente se produzcan modificaciones en este año electoral y tampoco con vistas al 2015, “porque los gobiernos argentinos no tienen visión del largo plazo; termina con la fecha de las próximas elecciones”. Aún considerando su visión crítica sobre la situación presente, el economista indicó “que la economía está en muchas mejores condiciones que en 2002”, agregando “que el Gobierno va a mantener su política económica con pocos cambios, apostando a una mejora en la situación económica de Brasil y a un precio de la soja elevado”.
Concluyó respondiendo con correcta disposición y apreciables conceptos los interrogantes planteados por el atento auditorio; mientras que directivos del Centro Comercial e Industrial le entregaron un presente de reconocimiento y agradecieron la participación activa de profesionales y público, que dieron positivo marco al enriquecedor cónclave analítico.