Era una noche más..., como tantas, pero la primera en que nos sentábamos en derredor de una mesa para hacer números. Había una caja de cartón con vales y dinero. Un balance en borrador y ansiedad por conocer el resultado económico final.
Después de 14 años Luca volvía al fútbol y sólo habían pasado 48 horas de nuestro debut en el remosado estadio que lucía coqueto y seguro con su alambrado olímpico.
"Yo aso el lechón para la próxima rifa", nos dijo a quienes compartíamos la reunión y sacó a relucir su noble solidaridad comprometiéndose a asistir a la reunión de delegados y dejar cien pesos para la comida de los jugadores.
Estaba alegre y contento con lo positivo de lo que dejó la cantina y las 600 personas que asistieron el domingo al debut.
Era un encuentro de amigos que conformamos la Comisión Municipal de Deportes. Cristian era el tesorero.
¡Nunca, jamás y ni pensarlo...!, que esa reunión iba a ser la última en que derramara su entusiasmo y ganas por "meterle fichas" al fútbol local.
Sentía el orgullo natural y noble de todo padre por que su hijo Geremy, representando al club Roque Sáenz Peña de Villa María, luciera el título de Campeón.
Compartía las alegrías de su benjamín en el baby fútbol y la alternancia jugando para las inferiores de su pueblo. Le ponía fuerza y voluntad al trabajo de dirigente.
Jamás retaceó tarea permanente, disposición y entusiasmo por ver a los jóvenes de Luca integrados en un equipo en la Liga Independiente de Fútbol.
El miércoles pasado se apagó la luz de "Roperito", pero quedó la puerta abierta de su claridad y encanto luchador. Su impronta, entusiasmo y pasión.
Cristian Roberto Monesterolo... serás el reflejo permanente de nuestros triunfos deportivos y estarás siempre en nuestro corazón.
Nuestras condolencias a todos sus familiares.
Comisión Municipal de Deportes Luca Fútbol