Con la firma de Gerardo Russo, presidente del Partido Justicialista (PJ); Verónica Vivó, presidenta alterna, y Sebastián Capurro, secretario general de esa fuerza política, llegó una carta a la Redacción donde el PJ local le responde al concejal Darío Capitani, quien pidió un debate de candidatos a diputados nacionales con miras a las elecciones de octubre.
Este es el texto de la misiva: “En recientes declaraciones periodísticas, el concejal del Pro Darío Capitani a puesto de manifiesto su intención de entablar un debate con los candidatos del Frente para la Victoria, Eduardo Accastello y Martín Gill, en ‘la misma mesa para que el ciudadano pueda conocer y diferenciar las propuestas de los candidatos.
En principio, debemos decir que todo debate de ideas es positivo dado que nos permite confrontar posturas políticas e ideológicas, políticas y propuestas de gobierno, reflexionar sobre lo realizado en todos los estamentos de gobierno, etcétera. Por supuesto que para generar este tipo de debates, como condición previa se necesita conocer lo que cada fuerza política ha realizado o lo que cada candidato expresa o propone. Y aquí la cuestión con el Pro se complica. No sólo por lo poco que dice, sino por lo mucho que oculta.
Lo único que hemos escuchado durante la reciente campaña electoral de boca de su principal candidato, Héctor Baldassi, es que es una buena persona y felizmente casado, algo que no ponemos en tela de juicio, pero que no nos dice nada acerca de lo que piensa sobre el país y la provincia. Tampoco expresa propuesta alguna, al igual que Capitani, confunde la publicidad marketinera que realiza con propuestas serias de gobierno que no expresan. O lo que es peor, esconden lo que realmente harán si son electos: retornar a los planes de ajuste de la década larga 1990-2001, tal como lo expresan los economistas del neoliberalismo que el PRO representa.
Ya se los escucha sostener que hay que enfriar la economía, reducir el gasto público, reprivatizar Aerolíneas, retornar a un sistema jubilatorio privado, eliminar las Asignación Universal por Hijo y volver al fútbol para pocos, entre otras medidas. Y, lo peor de todo, solapadamente nos están diciendo que no van a esperar a que el pueblo los elija, hipotéticamente, en el 2015 para retomar los planes de gobierno de la última dictadura militar y Martínez de Hoz, de Menem-Cavallo y de De la Rúa-Cavallo. Si logran una buena elección el 23 de octubre, irán por la Presidencia de la Cámara de Diputados para trabar el ejercicio del Gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en un claro ataque a la institucionalidad que dicen defender. Siempre se ha respetado en el parlamento nacional y en los parlamentos provinciales que la primera minoría conduzca la Cámara para poder sostener la gobernabilidad del país o las provincias. Lo otro es propiciar la paralización del Gobierno, introduciéndonos en un terreno en el que los argentinos no queremos vivir.
Quizás si Capitani y Baldassi se expresaran contundentemente sobre estas cuestiones, podríamos sentarnos en una mesa y debatir miradas sobre el país, la provincia y la ciudad. Mientras escondan sus ideas detrás de coloridos afiches y apelaciones a lo bien que les ha ido en la vida, y para no ser descorteses, sólo aceptaríamos jugar un picadito de fútbol para que se distiendan un poco. Y como no dudamos de las cualidades deportivas del exárbitro de fútbol, hasta aceptaríamos que él lo dirija. Ah, si logran que diga la verdad de lo que piensa, hasta lo pueden traer con los cortos a Mauricio”.