"Lo importante es que la persona con discapacidad o sus responsables -en caso de mucha dependencia- tomen conciencia de sus derechos. Que sean los primeros concientizados de sus derechos -y también de sus deberes-, así tendrán un desempeño más equitativo y de igualdad con el resto".
Esto resaltaron ayer las licenciadas Lorna Sidebottom y Silvia Antoyan cuando dialogaron con EL DIARIO, en un alto de la capacitación que se llevó a cabo en el Colegio de Profesionales en Servicio Social de Villa María y que se denominó "Mirada integral de la persona con discapacidad: el abordaje desde el trabajo social".
Con notable concurrencia, en un recreo las especialistas indicaron a este matutino que "la idea fundamental es brindar elementos para la intervención" de los trabajadores sociales en la temática y que "su prestación sea lo más acorde a lo que necesitan las personas con discapacidad y para que nuestros colegas puedan aprovechar los recursos institucionales que hay en la actualidad".
Admitieron que "en nuestra carrera no tenemos una formación específica en discapacidad", pero ellas han hecho un camino en el tema y tratan ahora de transmitir sus experiencias y conocimientos.
"Las primeras cosas que surgen (de parte de los trabajadores sociales) tienen que ver con cuestiones prácticas de articulación con recursos, con programas del Estado, obras sociales e inquietudes de las familias", especificaron.
Las entrevistadas desmenuzaron los distintos paradigmas de abordaje de la discapacidad desde la mirada del trabajo social y refirieron cómo aprovechar lo positivo de cada uno. También se centraron en analizar el marco legal nacional e internacional para hallar elementos que aporten a la defensa de los derechos de las personas y en pos de concientizar a la comunidad.
Los paradigmas "son el tradicional, el rehabilitador médico, el social y el integral centrado en la persona con discapacidad".
"La idea es justamente ir viendo cuál es el proceso que cada paradigma plantea en relación a la discapacidad, pero tratando que las intervenciones del trabajo social estén abocadadas en los últimos dos paradigmas, en donde se trata que la persona con discapacidad esté incluida, tenga autonomía y que tenga protagonismo en la toma de decisiones en su vida propia y en lo que tenga que ver con las políticas y la comunidad, que pueda beneficiarla a ella y a sus familias", recalcaron.
En su charla con este cronista, indicaron que "hay de todo en la sociedad, pero en general se ve una mayor apertura, porque hay mayor concientización, aunque todavía sobreviven muchos prejuicios y temores".
"A lo que no se conoce, se le tiene miedo o se trata de evitar, pero en general hay apertura", apuntaron.
"Lo importante es que la persona con discapacidad tome conciencia de sus derechos, así tendrá un desempeño más equitativo y de igualdad con el resto", sostuvieron.
"Son los primeros que deben defender sus derechos, pero nosotros tenemos que estar bien instrumentados para asesorar y acompañar", aclararon.