Un incesante interés del público tuvo la décimo séptima edición de la muestra organizada por la Agrupación Maquetista Villa María.
Por segundo año, la exposición tuvo como lugar el salón Bomarraca, ubicado en Sobral esquina Santiago del Estero y reunió a 95 expositores, un heterogéneo grupo conformado por maquetistas propiamente dichos, restauradores de autos y comerciantes de juguetes y hasta de aviones.
En diálogo con EL DIARIO, el presidente de la agrupación local, Sergio Cejas, se declaró satisfecho por la convocatoria que reunió por igual a niños y a adultos.
Cejas, quien presentó un "diorama" (es decir la representación de una escena) de los pertrechos de un escuadrón alemán de la Segunda Guerra Mundial, se declaró en desacuerdo con la iniciativa de que se discuta en varias ciudades respecto de la prohibición de los juguetes bélicos: "Yo me crié entre armas, y soy una persona pacífica, todo es según la educación que se recibe".
Otro de los atractivos de la muestra fue el ultraliviano biplaza "Raptor" fabricado en nuestra ciudad por la empresa Aerosud.
Según dijo a nuestro cronista Javier Deálbera, uno de los dueños, ya vuelan cinco aviones producidos en Villa María.
Tienen un costo de entre 25 y 35 mil dólares y pesan sólo 160 kilogramos, con una autonomía de cinco horas de vuelo.
Para aprender a pilotearlos se precisan 15 horas de vuelo. Andan con nafta súper y pueden aterrizar en terrenos lisos de sólo 200 metros.
Foto 2: Un niño observa las maquetas al natural de “Star Wars”
Foto 3: Un avión ultraliviano hecho en nuestra ciudad fue la vedette de la exposición. Su constructor explica al público las prestaciones de la máquina