“El Estado, tanto nacional como provincial, tiene materias pendientes en educación en la Argentina. Faltan mayores compromisos”.
Esto es lo que dijo ayer el intendente de Villa María, Eduardo Accastello, cuando dio su discurso en el acto que realizó el municipio por el Día del Maestro.
La ceremonia se llevó a cabo a las 9.45 en el monumento ubicado en bulevar Sarmiento y San Martín frente a la Universidad Popular, al cumplirse hoy 125 años del fallecimiento de Domingo Faustino Sarmiento.
Sorprendieron las palabras del jefe comunal cuando, en un tramo de su alocución, miró hacia la Nación con una clara demanda, algo poco común en su mandato. Pidió que se garantice salarialmente la profesión y “la dignidad del ser maestro”.
Aclaró que tanto desde provincia como nación “se hace mucho”, pero advirtió que “nunca alcanza en la tarea de ser docente”.
“Muchas veces el maestro está solo, tenemos que acompañar y hay que interceder desde el Estado no sólo presupuestariamente sino en su rol de acompañante, el Estado tiene que estar más cerca” del educador, subrayó.
Accastello habló cerca de las 10.10. Recordó a Mario Bachiochi, fallecido la semana pasada y “a los que dieron la vida, como Eduardo Requena”.
Luego hizo hincapié en la vocación de los maestros y más tarde aprovechó la ocasión de hablar ante el público para reiterar su rechazo a la guerra, en tiempos convulsionados por la nueva avanzada de Estados Unidos.
“Las guerras llenan de humillación a la humanidad. Los argentinos sabemos las consecuencias que a veces traen las guerras”, manifestó y le dio su solidaridad y acompañamiento al Papa Francisco por su postura a favor de la paz.
Responsabilidad social
En otra parte de su discurso, el intendente sostuvo que “el desafío de la docencia no sólo está en la escuela”, ya que los educadores “tienen una responsabilidad social muy fuerte” y detalló la de “escuchar al otro” y prestarle atención. A veces, son “el segundo padre, el amigo, el abuelo” y recalcó que “educar es cada vez más complejo”.
A su turno, le pidió más compromiso a la administración tanto nacional como provincial y dijo que “hay que estar más cerca” de los profesores.
El acto municipal se había iniciado con las palabras del inspector Daniel Vassia, quien calificó a los maestros como “héroes del esfuerzo”.
El supervisor apuntó que la educación “incide en las oportunidades y calidad de vida del individuo” y que “por eso necesitamos maestros” que vayan más allá de los conocimientos y que despierten “potencias dormidas”.
“Un educador debe amar su profesión, no hay alegría más intensa que la de enseñar. La dignidad del maestro se enriquece con sus propias acciones, es un regalo para la sociedad, es una bendición para los alumnos”, describió.
Dijo finalmente que es sinónimo de apóstol y aseveró que Sarmiento “se fue materialmente, pero dejó una huella imborrable”.
