Por una directiva del Ministerio de Educación de la provincia de Córdoba, ayer hubo un espacio de reflexión y análisis en distintas escuelas de la ciudad sobre bullying y otros temas.
En el Instituto Nuestra Señora del Rosario numerosos docentes mantuvieron una reunión en una de las aulas del establecimiento educativo y no hubo clases. Fue durante la mañana.
Uno de los temas que se trató en el encuentro fue la discriminación.
El docente Leonardo Muñoz, quien dialogó con EL DIARIO cuando terminaba el cónclave, dijo que al aula llegan diferentes problemáticas sociales, siendo una caja de resonancia de distintas situaciones. Una es la discriminación, por ejemplo, “hacia quien es súper aplicado o hacia quien no bebe (alcohol), porque pareciera que no puede suceder que alguien no tome”.
“Si bien uno puede individualizar este tipo de situaciones, hay cuestiones generales que se observan: expresiones desagradables que parecen estar instaladas. Decir ‘negro’, pero no desde el cariño, sino desde el insulto, visto como una descalificación”, develó.
También, se detecta que se toma como un agravio al ciudadano de Bolivia o de Paraguay. Así, despectivamente se llama “boliviano de m...” a alguien.
“Son cosas que se visibilizan en la escuela de hoy, están en la sociedad e ingresan al colegio”, admitió el profesional.
Otro de los temas que preocupan a los educadores es el alto consumo de alcohol. “El que no consume es visto por sus pares como un gil”, dijo con preocupación.
También se habló del reglamento interno, con su sistema de sanciones y manejo de diversas cuestiones en las clases. Por ejemplo, se trajo a la mesa de conversación la presencia de los teléfonos celulares por parte de los alumnos. Evaluaron que es positivo como herramienta didáctica, monitoreada por el profesor, pero de lo contrario no, por lo que debe ser apagado en clases.
Los docentes avanzaron en la concreción de propuestas para atender algunas circunstancias particulares.
Sólo dos padres fueron parte del encuentro.