El 25 de mayo pasado, coincidiendo con la movida electoral de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), vía Secretaría de Prevención Comunitaria , se anunció pomposamente la concreción de “una idea del intendente”, que entre otras cosas pidió abocarse “con cierta preponderancia” a la consigna de la señora presidente: “mirar para cuidar” la evolución de los precios al consumidor.
En consonancia con dicha noticia, al día siguiente, el profesor Gerardo Russo, titular del Partido Justicialista local (cuyo referente principal es el señor Eduardo Accastello, integrante de la lista de diputados nacionales del kirchnerismo) anuncia que “es tarea de todos” salir a “mirar” 500 artículos con precios congelados al 1 de febrero pasado, como medida tendiente a “frenar cualquier tipo de abuso”.
De no respetarse el congelamiento, propone denunciar dicho “abuso” ante los “organismos de control”.
El 31 de mayo, el secretario de Prevención Comunitaria ratifica que el señor intendente ha dado las orientaciones para “cuidar el bolsillo de los que menos tienen” y preanuncia “la implementación de otras políticas que serán anunciadas en los próximos días”.
El 6 de junio un grupo denominado “Militantes por la defensa de los derechos sociales” anuncia solemnemente su inquebrantable y disciplinada decisión de colaborar con la campaña “Mirar para cuidar”.
Más adelante, con profusión mediática, nos enteramos de una “visita” efectuada por el secretario comunal, junto con un grupo de colaboradores a algunos supermercados de la ciudad.
Finalmente, el 6 de setiembre, el Consejo Profesional de Ciencias Económicas comunica que en agosto del corriente año, el costo de los alimentos relevados por dicho Consejo, en Villa María, subió un promedio del 4,78%.
Que en agosto, la carne aumentó un 6,68%, el pan un 5,02%, las verduras y los huevos el 4,89%, los lácteos el 4,46% y luego vienen otros aumentos de menor proporción.
Extrañamente no he encontrado ningún comentario de quienes tienen a su cargo la misión de “ver para cuidar”, sobre el grave y alarmante informe del Consejo de Ciencias Económicas. De la exuberancia mediática pasaron al silencio más elocuente.
Quizás la dura realidad se impuso ante tanto palabrerío meramente discursivo y electoralista.
Mientras esperamos con ansiedad que antes de las elecciones de octubre, el señor intendente exponga sobre la pregonada implementación de las “políticas de defensa al consumidor” que se prometieron “para los próximos días” posteriores al 31 de mayo pasado.
Han pasado más de tres meses. Los precios siguen su carrera ascendente. Quizás el ascenso es tan vertiginoso que escapan a la capacidad física de percepción de los esforzados observadores.
¿O es que, como afirmaba Perón, “la única verdad es la realidad”?
José Naselli
Vecino de la ciudad