“Soy Pablo Rosso, nacido en Las Perdices un pueblo del interior de la provincia de Córdoba con más de cuatro mil habitantes y vengo a servir a usted y a la UTN en lo que se necesite”, dijo el decano de la UTN Villa María mirando al reelecto rector Héctor Brotto en la madrugada del sábado pasado tras haber sido electo como vicerrector de la casa de estudios a nivel nacional.
Con la simpleza de un joven hombre que supo transitar por las aulas como alumno, luego como docente y a la vez en funciones administrativas dentro de la Tecnológica, Rosso hizo emocionar a un auditorio que vitoreó largamente el logro obtenido.
Ayer, junto a referentes de todos los claustros, el ingeniero que ocupará el cargo de alcance nacional lideró una rueda de prensa que tuvo como tema excluyente su nueva responsabilidad.
En principio, el decano destacó el apoyo de los integrantes del Frente de Estudiantes (Egresados y Educadores) Tecnológicos Independientes FETI) “en la cual muchos vienen trabajando hace más de 15 años y que nació en el claustro estudiantil, progresó en los graduados y desde hace poco en los docentes también”.
“A nivel nacional se ha logrado que muchos del FETI ocupen cargos de gestión y además de ello el no menor apoyo que desde el inicio mostraron los no docentes a través de su secretario general, Norberto Gutiérrez”, remarcó.
“Además agradezco al grupo de decanos que también entendieron la necesidad de conformar este proceso con una persona joven y con experiencia de gestión en Villa María, llevada adelante entre todos que al momento de ser analizada creo fue la que pesó para lograr esta oportunidad”, sostuvo.
“El objetivo que teníamos era participar, con eso ya estábamos satisfechos y significaba mucho. Lograr el triunfo nos hace sentir muy orgullosos y que se comparte no sólo con el presente de esta casa sino también con la historia de una Facultad que tiene más de 40 años de trayectoria”, redondeó.
Doble rol
Respecto a su futuro cumpliendo con el doble rol de decano y vicerrector, Rosso indicó que no existe incompatibilidad estatutaria que impida que los dos cargos puedan ser ejercidos al mismo tiempo.
Al referirse a la posibilidad de que vuelva a postulase como decano de la Facultad Villa María en los comicios que se realizarán a principios del año próximo, el mandatario adelantó que “la agrupación será la que decidirá quién es la persona indicada para seguir al frente del decanato. En un tiempo más seguro definiremos cuál será el hombre que se va a presentar como candidato a decano en esta Facultad”.
Sobre su postura personal frente al tema, el decano dijo que “estaría dispuesto a seguir” pero apelando a la cautela sostuvo también “que sería apresurado dar una respuesta sin tener en cuenta la opinión del resto de los miembros del FETI a nivel local”.
En otro tramo del diálogo establecido con los medios de comunicación, Rosso ponderó las condiciones de su compañero de fórmula (Héctor Brotto) que logró ser reelegido por sexta vez consecutiva al frente de la UTN.
“Fue el poder de convocatoria del rector en los distintos claustros y las agrupaciones en que se referenció durante los últimos tiempos, la que le dio a nuestra Universidad el debate interno necesario no sólo para consolidar a Brotto al frente del Rectorado sino para que en una convocatoria amplia muchos referentes de nuestra comunidad se sentaran a diagramar proyectos”, dijo el decano.
“La intención de estar en un proceso permanente de revisión de nuestras carreras de grado o el llamamiento a seguir ampliando la relación de la UTN con la sociedad en su conjunto, manteniéndonos como un espacio de puertas abiertas que defiende la opinión pública, se presenta como una oportunidad para las generaciones que tenemos ganas de colaborar con el futuro, en combinación con la experiencia de muchas personas que creo tienen mucho para dar y seguir trabajando”, enfatizó.
“Esta no es un tarea para uno o dos hombres sino para todos los que integramos la UTN ya que estamos presentes en 29 puntos del país, distribuidos en 12 provincias, lo que marca un importante desafío”, acotó.
Según sostuvo Rosso, en las próximas semanas y posterior al encuentro que tendrá con la organización política que integra se definirán si habrá colaboradores locales en la gestión que iniciará a partir de diciembre.
“Aquí hay mucha gente capacitada que sin ninguna duda puede ser convocada a participar de algún cargo para colaborar, obviamente en las líneas que el Vicerrectorado tenga encomendadas misiones que determina el rector. Oficialmente el estatuto marca que el vicerrector tiene a su cargo la Junta Electoral”, puntualizó.
“Hasta el momento el rector no ha determinado misiones o funciones para el Vicerrectorado. Lo que nos encomiende estamos dispuestos a llevarlas a cabo en lo que entendemos va a ser una gestión más que importante ”.
“Este es un equipo que siempre que nos hemos convocado, lo hemos hecho para trabajar. Así que creo que después de toda la experiencia que como grupo hemos logrado acumular, estamos preparados para asumir nuevos desafíos de trabajo, a nivel local para seguir contribuyendo con la ciudad y región, y ahora también puertas afuera a nivel nacional”, expresó.
“Hay facultades chicas y medianas donde creo que va a ser importante la visión que le podamos dar todos nosotros en instancias que como institución ya hemos superado. Tratar de coordinar ese nivel de comunicación interinstitucional va a ser más importante”, reflexionó el dirigente.
Como desafío, Rosso consideró que se erige “la protección e incremento del nivel de excelencia académica” que se traduce en las 16 carreras acreditadas por la Coneau (el 60% con seis años), en una universidad con cien mil alumnos, ocho mil docentes y dos mil no docentes, que genera en la actualidad el 46% de los graduados en Ingeniería.
Entre las salutaciones recibidas, Rosso destacó las del secretario de Políticas Universitarias, Martín Gill; del intendente Eduardo Accastello, del legislador Darío Ranco y los exdecanos Juan Carlos Peretti (que declaró “estar muy contento” por el logro), y de Carlos Rapp, además de gente de la región, amigos y vecinos de Las Perdices.