El último martes, en la reunión de la Mesa Directiva de la Liga Villamariense de Fútbol, se vivió un clima de tensión y fuertes discusiones a raíz de la polémica medida que se tomó el lunes en inferiores que determinaba que, en Sub 17, únicamente debían ser elegidos jugadores de los clubes que participan en cuarta división.
A grandes rasgos, dicha disposición fue rechazada enérgicamente (se la describió como “discriminatoria” y “bochornosa”) y con argumentación por los clubes que se manifestaron en contra (principalmente por el delegado de Española, Juan Pablo Torres), por lo que se aprobó la anulación de la misma y entonces todos los jugadores clase 96 tendrán su posibilidad de ser seleccionados.
A su vez, también se establecieron otras determinaciones en cuestiones que abarcan a los seleccionados (como el cupo máximo de jugadores que podrán ser elegidos por cada club).
Sin dudas, como sucede todos los años, el “tema seleccionados” continúa siendo una “cuestión problemática” sin solución para el seno de la institución, porque no cuenta ni con proyectos ni bases de trabajo dispuestas de antemano (esta vez, ni se incluyó en el presupuesto anual, por lo que la participación estuvo en vilo hasta último momento, ya que la mayoría de los clubes descartó, con sus fundamentos, cualquier aporte extra).
Por lo tanto, las decisiones terminan dándose a las apuradas o sin antes ser consensuadas, lo que continúa generando rispideces entre los directivos y que, en definitiva, culmina afectando a los protagonistas porque en el plano deportivo serán los jóvenes de 15 y 17 años (con sus cuerpos técnicos) los que representarán con prácticamente con nula preparación a su Liga Villamariense de Fútbol a nivel Provincial.