La Asociación Gremial de Empleados de Poder Judicial (AGEPJ) resolvió llevar adelante una serie de medidas de fuerza para que el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) elabore la “tabla” con los montos de los salarios que percibirían los empleados con la reclamada porcentualidad.
La medida consiste en un paro para hoy con movilización a la Casa de Gobierno. “En el interior es sin asistencia a los lugares de trabajo y en capital, con abandono de tareas para participar de la marcha”, dijo Jorge Montes, secretario general de AGEPJ Villa María.
El cronograma de acciones de protesta incluye asambleas el lunes y martes de la semana próxima durante toda la jornada laboral y paro total de actividades para el miércoles y jueves, sin asistencia a la sede de Tribunales.
Esto hace que el Poder Judicial no trabaje normalmente hasta el viernes 4 de octubre, aunque se descarta que de no mediar solución, esa jornada y las siguientes seguirán con diferentes protestas.
“Como mínimo, seguiremos adelante con el trabajo a código, que no es otra cosa que hacer lo que nos corresponde. Es decir, no tomar audiencias, no escribir sentencias, que es una tarea que deben desempeñar los funcionarios judiciales, pero que en la práctica de Tribunales le fue asignada a los empleados, sin que recibamos remuneración por eso”, agregó.
Dijo que le parece llamativo que el Tribunal Superior siga “enviando e-mails con acordadas que ya fueron impugnadas por la Organización Internacional del Trabajo, tratando, por ejemplo, de hacer figurar como servicio esencial -lo que garantizaría guardias mínimas aun con paro- el servicio del Poder Judicial”, agregó.
s Los motivos
A la hora de informar sobre las razones de la contundente protesta, Montes explicó que si bien el Tribunal Superior de Justicia acordó con la porcentualidad, lo hizo en abstracto y no cuantificándolo en base a los salarios reales de trabajadores y jueces.
Es decir, la porcentualidad no es sólo que a partir de 2014 los empleados recibirán el mismo porcentaje de aumento que los magistrados, sino que lo que pide el gremio es partir de una base real para calcular el porcentaje del sueldo del magistrado que debe ganar un empleado.
“Nosotros pedimos que se fije, en función de un salario de un vocal del Tribunal Superior, un porcentaje para los trabajadores. Con nuestros números, un meritorio pasaría a percibir menos de 9.000 pesos -actualmente está en 6.000 pesos en bruto-. Cuando se comenzó a trabajar en la cuantificación, ellos se retiraron de la mesa de negociación”, puntualizó Montes.
Finalmente, consideró que la falta de diálogo de parte del TSJ lleva a la provincia a dejarla sin Justicia, lo que es considerado por el dirigente “como de una gravedad absoluta”.