“Con fecha 13 de septiembre de 2013, informa la edición de EL DIARIO del centro del país, en su página 6, que el Concejo Deliberante aprobó la creación del “Paseo del Ciudadano Ilustre y Notable” en el ámbito de la plaza Alfredo L. Palacios, sita en el barrio Carlos Pellegrini.
Agradezco la generosidad de incluir mi nombre en tan significativo honor. Circunstancialmente acuden a mi memoria nombres de otros ciudadanos que merecieron en su oportunidad la misma denominación u otra equivalente, a quienes con toda justicia deberíamos honrar.
En la fecha en que la ciudad de Villa María festejó sus 75 años, en 1942, el entonces intendente municipal Salomón Deiver -de grata memoria para las sucesivas generaciones- asignó reconocimientos y distinciones de ‘benefactores de la ciudad’ a un grupo de honorables vecinos, a quienes recuerdo con todo cariño. Fueron ellos: doctor Antonio Sobral, presbítero Pablo Colabianchi Cicerón, Rafael Pellegrini, Francisco Vargas, Bernardo Seco, Elena Weis de Seppey, Elisa Cardama de Pereyra, Silvino Seggiaro, así como el reconocimiento posmórtem al doctor Horacio Quiroga. Este gesto de parte de la autoridad municipal es quizás el antecedente más remoto de la actual nominación de distinciones a nuestros vecinos.
La ceremonia de entrega, muy tocante al sentimiento de la gente, aconteció al pie del Monumento al Cristo Redentor, con asistencia del señor gobernador de la provincia, doctor Santiago H. del Castillo.
Seguiré haciendo memoria para rescatar de ella otros nombres que, en el transcurso de la ciudad, merecieron honores equivalentes. Afectuosamente.
Horacio Cabezas