Al 30 de septiembre, cuando cerró la campaña de matriculación de profesionales de Ciencias Económicas que se desempeñan en relación de dependencia, el Consejo Profesional de Ciencias Económicas (CPCE) de Córdoba sumó 11.500 matriculados, lo que implica un crecimiento del 60% en la última década.
A ese total, todavía quedan por sumarle unas 500 solicitudes más que todavía se están procesando y que no fueron legalizadas. De la matrícula global, un 15% está en relación de dependencia.
Antonio Bearzotti, vicepresidente del CPCE, se mostró muy conforme con el resultado del trabajo realizado este año, que puso el acento en un plan de acción que incluyó “visitar, informar, ilustrar y persuadir” a un conjunto de profesionales a quienes no se les había explicado la obligación de matricularse.
En ese contexto, representantes del CPCE se reunieron con referentes de distintos ámbitos tanto en la capital como en el interior provincial, en este último caso, en empresas medianas como Dulcor, Pharma, La Piamontesa, la Cooperativa Eléctrica de Marcos Juárez, otra de Justiniano Posse y una compañía agroexportadora de Jesús María.
La matrícula especial en Córdoba surge a partir de la sanción de las nuevas leyes, que incorporan la posibilidad de una matriculación diferencial para los profesionales que se desempeñen en relación de dependencia y que ya cuentan con cobertura previsional y de salud. Con el actual esquema, este conjunto puede ingresar al CPCE y acceder a todos los servicios que brinda, abonando sólo el derecho de ejercicio profesional.
La ley remarca que “los inscriptos en la matrícula especial no están habilitados para ejercer la profesión liberal o independiente”.