Señor director:
Con mi familia queremos agradecer a tantas personas que con motivo de la enfermedad y fallecimiento de mi hijo, Marcelo Fabián Sabena, quien era personal de la Policía de la provincia de Córdoba y ostentaba la jerarquía de oficial principal, desempeñando sus funciones como encargado de la Subcomisaría de Arroyo Cabral dependiente de la Unidad Regional Departamental San Martín.
Vaya nuestro reconocimiento a todos los que colaboraron de una u otra manera con nosotros, haciéndonos llegar su cariño y apoyo.
Muy especialmente al jefe de la Unidad Regional Departamental San Martín, comisario Mayor Daniel Ferreyra, segundo jefe comisario Mayor Julio César Suárez, jefe de inspectores zona comisario Inspector Omar Gallo, personal del Departamento "Bienestar policial" de la ciudad de Córdoba y a todos los integrantes de dicha UOM que además de camaradas eran amigos incondicionales.
Hacemos extensivo el agradecimiento a los Bomberos Voluntarios y establecimientos sanitarios, Hospital Pasteur, personal de la Cruz Roja (en especial Daniel Loyola), Instituto Roentgen, Sanatorio Cruz Azul y Clínica del Salvador de la ciudad de Córdoba, como así también a la Municipalidad y vecinos de Arroyo Cabral y su jurisdicción.
A los vecinos (en especial la familia Gómez), familiares, amigos de la comunidad católica, sacerdotes de esta Diócesis, hermanos de otros credos religiosos y a todas las personas que sin conocernos nos brindaron su apoyo, seguramente nos estamos olvidando del nombre de muchos que nos hicieron compañía.
Cuando les digan que en la sociedad ya no existen los valores fundamentales como el amor y la solidaridad, díganles que no es cierto, que todavía hay muchas personas que sin esperar recibir nada a cambio, ofrecen su corazón en estas circunstancias. Rogamos a Dios Nuestro Señor que derrame su gracia y bendiciones a todos ellos.
Por nuestra parte, reciban nuestro más sincero cariño y agradecimiento de parte de su esposa Nancy Perón, sus hijos Lucas, David y María Belén, sus padres, hermanos y demás familiares.
Jorge Sabena y familia