Los integrantes del Comité Departamental del radicalismo se despacharon duro contra el peronismo cordobés y el kirchnerismo.

Un día después de la visita a Villa María del candidato de la lista roja y blanca Oscar Aguad, las autoridades de la UCR cargaron sus tintas y dispararon sobre los adversarios en esta campaña electoral que gana fogosidad a medida que se acorta la distancia en el camino a las urnas. 

Claudio Beletti, Luis Tagni y Gustavo Domenech, antes de conocer el problema de salud de la presidenta Cristina, suscribieron un documento que castiga por igual a José Manuel de la Sota y a los integrantes del Gobierno nacional.

“Es lamentable el nivel de enfrentamiento alcanzado por los gobiernos nacional de Cristina de Kirchner y el provincial de José Manuel de la Sota, cruzando acusaciones en forma permanente y atacándose por cualquier motivo, en lugar de buscar en forma conjunta y consensuada las soluciones que necesitamos los cordobeses ante los serios problemas que afectan a nuestra provincia y que repercuten también en la Nación”, comenzó manifestando el escrito enviado a nuestra Redacción.

Seguidamente, puso en el tapete la figura del vicepresidente de la República, Amado Boudou, recordando que “tiene problemas judiciales que no puede resolver”.

“Lo mismo podría decirse de los amigos económicos del poder, en el caso de Lázaro Báez y Fariña, todo fruto de una Justicia lenta y de un autoritarismo que no permite admitir las dificultades que atraviesa el Gobierno nacional”, señaló la proclama.

 

“Las mismas prácticas”

 

Los dirigentes del Departamento San Martín se dedicaron luego a cuestionar al gobernador. “De la Sota comete el grave error de criticar la falta de diálogo de parte de la presidenta, pero tiene las mismas prácticas con los intendentes radicales cordobeses, a los que criticó recientemente y a los que discrimina al momento de distribuir fondos en calidad de ayudas económicas respecto a sus pares del peronismo.

Un De la Sota cuya Policía provincial tiene un sector que está siendo investigado por supuesta complicidad con narcotraficantes, cosa que de ser cierta cabe la incertidumbre sobre no saber en qué manos estamos al momento de hablar sobre seguridad”.

 Beletti, Tagni y Domenech apuntaron, en otro de los párrafos del documento, contra lo que llaman el “dinero mal gastado”.

“En algo coinciden ambos gobiernos, en el derroche de dinero en publicidad, con la sola finalidad de convertir las respectivas gestiones en instrumentos que les permitan ganar elecciones y continuar en el poder, sin tener en cuenta el aumento de la pobreza, una mejor educación, salud, construcción de viviendas, mayor seguridad, entre tantas demandas sociales”, señalaron.

En el párrafo final, el radicalismo que apuesta a la re-relección de Aguad aseveró: “Ante estas situaciones, creemos que a 30 años de haber logrado la recuperación definitiva del sistema democrático de gobierno de la mano del radicalismo, hoy nuevamente este centenario partido tiene la responsabilidad y la capacidad de corregir los errores que se están cometiendo en el abuso de poder por el afán de aplicar medidas de gobierno antojadizas y sin un verdadero acuerdo nacional, que logren la posibilidad de organizar, dictar y aplicar medidas y políticas de Estado, que no sólo sirvan para un gobierno, sino para los que sobrevendrán a mediano y lago plazo, para de esta forma dar la posibilidad de contar con un país serio y maduro, que logre un verdadero desarrollo que beneficie a la sociedad en su conjunto”.