Con el patrocinio de los abogados Juan Antonio Rusconi y Ricardo Gutiérrez, el contador Néstor Nolberto Mania formuló ayer un pedido de quiebra de la firma constructora Proyectos Urbanísticos SA, presidida por los empresarios locales Francisco Rubén Ariotti (66) y Diego Chicco (40).
La presentación fue realizada a las 11 de la mañana en el Juzgado Civil, Comercial y de Familia de Primera Nominación, a cargo de la jueza Ana María Bonadero de Barberis, Secretaría de María Aurora Rigalt, a raíz de la emisión de un cheque sin fondos por un monto de 60 mil pesos.
En diálogo con EL DIARIO, el abogado Rusconi precisó que cuando su cliente quiso cobrar ese valor “fue rechazado por carecer de fondos”.
“Intimamos a los deudores por carta documento y como no respondieron se decidió iniciar esta acción judicial”, añadió el letrado, quien precisó que el cheque en cuestión lleva las firmas de Ariotti y Chicco, quienes figuran como presidente y vicepresidente de la empresa, respectivamente.
Rusconi agregó que “Mania solicita la quiebra en carácter de acreedor” y adelantó que hoy presentarán en el Juzgado nuevas pruebas en contra de la firma constructora, a partir de los datos obtenidos a través de la Central de Deudores del Sistema Financiero del Banco Central de la República Argentina (BCRA).
Más de un millón
Según dicho organismo, Proyectos Urbanísticos libró más de un centenar de cheques sin fondos por un monto que supera el millón de pesos.
“En el resumen de cheques rechazados en cuentas de personas jurídicas del BCRA aparecen 116 cheques rechazados, por un monto de 1.060.787,30 pesos”, puntualizó Rusconi, y agregó que “sólo levantaron 20 de esos 116 valores, por un total de 140.512 pesos”.
El letrado sostuvo que “todos estos cheques fueron presentados y rechazados durante el transcurso de agosto y septiembre” pasados y añadió que la firma tiene cuentas en los bancos Nación, Macro, Provincia de Córdoba y Galicia.
Proyectos Urbanísticos SA tiene oficinas en Buenos Aires 680 de esta ciudad, frente a la plaza San Martín, y en la AFIP aparece inscripta como una empresa dedicada a la construcción, reforma y reparación de edificios residenciales, y opera oficialmente en el mercado inmobiliario desde el 28 de octubre de 2002.
Ahora, la jueza Bonadero de Barberis deberá analizar las pruebas que se vayan incorporando a la causa y, oportunamente, resolverá si hace lugar, o no, al pedido de quiebra formulado por el contador Mania.