Esta semana asistiremos a un acontecimiento histórico. Hoy quedará habilitado un nuevo nexo para acercarnos con la vecina Villa Nueva y, más allá de lo que significa arquitectónicamente la obra (los kilos de hierro, cemento y arena, entre otros elementos), el puente consolidará la relación con los villanovenses y mejorará la calidad de vida de los vecinos de las dos ciudades.
Desde hoy el paisaje de la costanera ya no será el mismo. Así como el Anfiteatro techado refleja su imponente estructura en el espejo de agua que significa nuestro lago, en la otra punta el puente hará lo propio para embellecer aún más el Balneario que lleva el nombre de quien fue, quizá, el villamariense más heroico: Juan Carlos Mulinetti.
Siempre que tuvimos oportunidad de hacerlo, quienes soñamos e hicimos Juntos por el Barrio destacamos los aspectos positivos de lo que pasaba en este sector de la ciudad. Porque crecimos en el barrio Parque General Paz y allí elegimos seguir viviendo, que crezcan nuestros hijos, ver jugar a nuestro nietos y recibir a los nuevos vecinos que vienen a habitar el pulmón de la ciudad.
Seguramente, los que peinamos canas no vamos a mezquinar lágrimas ante esta inauguración. Crecimos con el puente Vélez Sarsfield que está en nuestras fotos, en nuestras anécdotas, en nuestras vidas. Ahora, serán otros quienes construirán sus historias con esta obra de telón de fondo.
El puente que llevará el nombre de Juan Domingo Perón, el presidente que más hizo por los humildes y los trabajadores en la historia argentina, será una nueva muestra del desarrollo que logramos en Villa María. Con las importantes obras de infraestructura que se desarrollaron en los últimos años nos consolidamos como una de las ciudades más importante del interior provincial. Tenemos la posibilidad de recibir al turismo que llega desde todos los puntos geográficos, a los estudiantes que vienen para cursar en nuestras universidades, a los principales artistas que eligen nuestro Anfiteatro o el bello Teatro Verdi y a la cultura que se da cita en el predio ferrourbanístico con la Medioteca, el Centro Cultural Comunitario y la Tecnoteca. Ahora, tal vez, nos queda (como materia pendiente) contar con un parque deportivo que nos permita recibir a los mejores exponentes del país en materia de deportes y, al mismo tiempo, que los clubes locales puedan desarrollar su potencial y disponer de un espacio apropiado para ello.
Decíamos antes que siempre pensamos las cosas desde su aspecto positivo y no íbamos a ser menos en este momento. Más allá de las denominaciones, Villa María y Villa Nueva vivirán un acontecimiento que quedará en la historia y mejorará la comunicación entre estos dos pueblos que decidieron proyectar el futuro, consolidar el presente y respetar el pasado.
Daniel Climaco
DNI 11.527.499
Capitani: así, no
Quede bien claro que no voy a discutir ni polemizar con usted por un principio de que quien lo hace con alguien capaz de pronunciar extralimitaciones miserables corre el riesgo de que a los diez segundos la gente no distinga cuál es el miserable.
Usted me invitó en la semana a una conferencia de prensa con Mauricio Macri, Héctor Baldassi y compañía, el pasado sábado a la hora 17.15. Me rogó que fuera. ¿Sabe usted la gracia que a uno le hace una convocatoria un sábado, habiendo tantos días hábiles en la semana? Le prometí y aseguré ir.
El sábado me confirmaron a media tarde la hora: 17.15. Todo bien. A las 16.50 vuelve a hablarme, pero esta vez para comunicarme que se adelantaba 15 minutos. Dejé lo que estaba haciendo a varios kilómetros del centro. Por un momento pensé “qué cambio hacían los políticos, habitualmente acostumbrados a demorar hasta 45 minutos los inicios de las conferencias. Llegué justo a las 17. Duró poco la ilusión; cuando llegué me encontré con un compañero colega y amigo que me anotició que los supuestos cumplidores se habían ido a una entrevista en0 una radio distante 50 metros del Café de la Música, lugar de la convocatoria. Eximo al joven conductor del programa que nada tuvo que ver, pero valga decir que -en medio de la indignación y la falta de consideración a la que estábamos siendo sometidos- optamos por irnos y hacérselo saber a los miembros del equipo del PRO y las razones. “Ya vienen en seguida”, argumentaron. No era cuestión de minutos más, o menos, sino del hecho de que a la hora de la conferencia de prensa privilegiaron a un medio en desmedro de los demás.
Encendí la radio y escuché hasta cerca de las 17.20 un “sustancioso diálogo político haciendo futurología de cómo iba a salir el partido entre River y Boca”. Lo peor vino después, cuando usted le dijo por teléfono a mi colega, compañero y amigo que era un “h de p”. Como yo fui solidario e hice causa común (¿usted conoce la solidaridad?) entiendo que su afrenta se extendió también a mi persona, sólo que no tuvo la valentía de decírmelo personalmente, ya que mi madre, fallecida, era una santa, lo que también nos constituyó en los “hijos de la pavota”. Por esa razón, lo invito -ya ve que soy considerado, lo invito- a que públicamente se retracte y, de paso, lo exhorto a tomar algún curso de autoestima y respeto, así como otro curso acelerado de “conducción”, porque si “los cambios” que quiere meter son así, según el eslogan que esgrimen, seguro que en lugar de meter cambios meterá la pata, como en este caso, poniendo la marcha atrás o, cuanto menos, el punto muerto. Cualquiera fuera el error no sirve para arrancar y, menos, para convivir en una sociedad culta y de mutuo respeto. Al final, me queda una duda: ¿Mauricio Macri y Héctor Baldassi conocerán y compartirán semejante tratamiento?
Héctor Cavagliato
DNI 6.586.794