La Justicia de Córdoba ordenó a la Municipalidad de Malvinas Argentinas, donde se construye una planta de la multinacional Monsanto, que no se autorice su puesta en marcha “mientras no se cumplimenten los requisitos previstos por las leyes” sobre impacto ambiental, informó el Poder Judicial de la Provincia.
La orden de no autorizar la “etapa operativa de la Planta de Acondicionamiento y/o Secadora de Maíz” fue emitida por la jueza de Conciliación de 4ª Nominación de Córdoba, Graciela Escudero de Fernández.
La prohibición se mantendrá “mientras no se cumplimenten los requisitos previstos por las leyes, con la verificación de todos los recaudos por parte de los distintos organismos públicos”, señala el fallo.
La jueza Escudero exige, “en especial, la realización del correspondiente estudio de impacto ambiental, preservando el derecho a información de todos los ciudadanos”. Asimismo, señala que, en ese caso, se deberá realizar una audiencia pública “a fin de evaluar adecuadamente los riesgos y consecuencias que trae consigo el funcionamiento de la planta en el Municipio, en procura de la defensa del ambiente y de los recursos hídricos de la Provincia”.
Exigen estudios de impacto ambiental
En Malvinas Argentinas, Monsanto levanta una planta a la que se oponen ambientalistas y vecinos que reclaman una consulta popular y exigen estudios de impacto ambiental.
Durante una manifestación a fines de septiembre, dos ambientalistas fueron detenidos cuando impedían el ingreso al predio de Monsanto y se negaron a ser desalojados por la Policía, que intentó dispersarlos.
A mediados de año, el Tribunal Superior de Justicia de Córdoba ratificó que Monsanto puede seguir con la construcción de la obra, en un predio de 27 hectáreas sobre la ruta provincial A-188, aunque no con la puesta en funcionamiento de la planta, que dependerá de los estudios de impacto ambiental.