Fue una verdadera fiesta para las dos ciudades y en el símbolo de unión que significa el puente se reunieron las principales figuras del Gobierno nacional.

No estuvo Cristina con su presencia física, en la tarde-noche de ayer en la costa del lago, pero su nombre fue coreado por las miles de personas que se dieron cita en el acto de inauguración del nuevo puente entre Villa María y Villa Nueva.

Su presencia se sintió, casi en forma permanente, en los mensajes transmitidos desde el escenario por el vicepresidente, a cargo de la Presidencia, Amado Boudou, y por el intendente Eduardo Accastello. Fue una verdadera fiesta, no sólo para el público, sino para Accastello y su par villanovense Guillermo Cavagnero. A las orillas del Ctalamochita llegaron Boudou y dos de los hombres más poderosos de la Nación: el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini, y el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli.

Y la fiesta tuvo su gran “castigado”, el gobernador José Manuel de la Sota, enfrentado hoy con el Gobierno nacional.

“Esta región es progresista, no somos el patio trasero, somos el centro progresista de Córdoba”, dijo Accastello.

Boudou, por su lado, arengó: “En la Argentina amamos a los cordobeses, pero no es el cordobesismo lo que hace grande a la provincia, es formar parte de un proyecto nacional que tiene nombre: Cristina”.

Y los cánticos en contra de la Sota se multiplicaron en las plateas mientras se agitaban las banderas de las diversas organizaciones que adhieren al kirchnerismo.

Fue una fiesta, sin duda, que terminó con la música de La Fiesta, el cielo iluminado por los fuegos artificiales, Boudou recibiendo el cariño de la gente y empezó con el corte de cintas.

 

Corte de cintas

 

A las 19.26 la comitiva nacional integrada por Boudou, Zannini, Parrilli y Nelson Pierotti (Vialidad Nacional) pisó el flamante puente para hacer el tradicional corte de cintas en la mitad del cruce.

Los acompañaban los dos intendentes, los candidatos del Frente para la Victoria Carolina Scotto y Martín Gill y la diputada nacional Nora Bedano, entre otros referentes.

Los aplausos se multiplicaron cuando los principales protagonistas subieron al escenario. El acto protocolar comenzó con la entrega de los decretos declarando Huésped de Honor a Boudou y el regalo para el vicepresidente de un cuadro con una moto forjada en hierro.

Seguidamente, Boudou presidió por videoconferencias tres actos: en Avellaneda, Berazategui y Concordia (ver página 4) y entregó 28 ambulancias a los intendentes de diversas localidades cordobesas.

A las 20, aproximadamente, tomó la palabra el intendente Eduardo Accastello.

 

“No tenemos miedo de decirlo”

 

“Queremos decirles a todos que este puente lo pagó el Gobierno nacional, no tenemos miedo de decirlo, no nos avergonzamos”, afirmó Accastello después de agradecer la presencia de “Amado” y de todas las autoridades que acompañaron la ceremonia.

Rápidamente, mencionó a Cristina. “Esa mujer que con su fuerza, con su vocación sale adelante de todas las situaciones”, dijo y agregó a la lista de agradecimientos a las dos ciudades, a los trabajadores que hicieron la obra, a Pierotti y a los presentes.

“Recibimos a Amado con el corazón abierto, esta ciudad no es el patio trasero, fue la capital de la República por 24 horas”, destacó en clara respuesta a los dichos de José Manuel de la Sota.

Y continuó metiendo el dedo en la “herida”. “Esta región es progresista, somos el centro progresista de Córdoba. Esta región no tiene villas, ni countries, trabajamos como una comunidad organizada y tratamos de sumarnos a un proyecto nacional que humaniza”.

Su compromiso de apoyar al proyecto nacional y acompañar las candidaturas de Scotto y Gill quedó bien grabado en los veinte minutos que duró su oratoria.

“Córdoba requiere un proyecto de desarrollo”, señaló recordando cifras de 2003 a la fecha en un intento de graficar el crecimiento de la denominada “década ganada”.

Sus palabras repasaron las obras realizadas, el Parque Industrial, el flamante puente y otra vez apuntó al gobernador de la provincia.

“Las obras se inauguran así, terminadas, no como otros que hacen grandes anuncios como el Hospital y “nos quieren entregar una cáscara vacía”.

“Córdoba somos también nosotros y aquí progresamos por más que nos traten de patio trasero”.

Las figuras de Amadeo Sabattini y el brigadier San Martín fueron los rescatados de la historia por el intendente local.

Y, por supuesto, subrayó con énfasis: “Este puente compañero Juan Domingo Perón lleva tu nombre”.

En su extenso discurso elogió los planes de la Nación, el Procrear, la Asignación Universal por Hijo y las obras de infraestructura básica, proyectos nuevos que ya fueron autorizados por la Nación y permitirán dotar a casi todos los sectores de cordón cuneta, pavimento y gas.

“Gracias Néstor y Cristina por devolvernos la expectativa de creer, de sentir”.

En el tramo final, convocó a Cavagnero y rescató palabras de Perón. “Un pueblo no se hace en una hora, se hace su esencia y su historia...”.

“La actitud de los tibios se parece a una deserción”, concluyó para dejar la posta a Boudou.

 

“Amamos a los cordobeses”

 

“Anoche, por anteanoche, Cristina me dijo llevales un abrazo enorme a todos”, fueron las primeras palabras del vicepresidente, en ejercicio de la Presidencia.

Boudou fue breve y se encargó también de tirar municiones para el peronismo cordobés representado por de la Sota. 

"Amamos a los cordobeses, por su industria, su música, su fútbol, su universidad, pero no es el cordobesismo el que hace grande a Córdoba, sino formar parte de Argentina, que tiene un proyecto que defiende los puestos de trabajo todos los días, y eso tiene un nombre, el nombre de Cristina Fernández de Kirchner", señaló en el primer tramo de su alocución.