n el marco de la celebración del Día Mundial de la Salud Mental, el pasado 8 de octubre, la Dirección Nacional de Salud Mental y Adicciones, dependiente del Ministerio de Salud de la Nación, presentó el Plan Nacional de Salud Mental, elaborado con los aportes de diversos actores y sectores del ámbito nacional, provincial y local.
Como institución comprometida en la formación integral de profesionales de la Psicología sobre la base de una concepción de la salud mental entendida desde la perspectiva de los derechos humanos, la participación comunitaria y la inclusión social, consideramos que los desafíos actuales que implica el ejercicio de la profesión al interior de las disciplinas que intervienen con el padecimiento de las personas, exige de un reposicionamiento y un compromiso por generar nuevas prácticas interjusrisdiccionales, intersectoriales y transdisciplinarias.
En este sentido, y luego de un arduo trabajo de elaboración, el Plan Nacional se funda como herramienta para la definición de políticas públicas concretas de acuerdo al nuevo paradigma de inclusión y derechos que plantea la Ley Nacional de Salud Mental 26.657. Asimismo, favorece el involucramiento y la articulación entre los actores institucionales, profesionales y sociales implicados en promover la salud mental de la población.
Este Plan, de acuerdo al análisis desarrollado, pone en evidencia dimensiones deficitarias existentes tales como: la discriminación de las personas con padecimiento mental; deficiencias en la conformación de una red de Salud Mental que favorezca la prevención y el abordaje desde una perspectiva de derechos e inclusión; dificultades en la atención de problemáticas asociadas al consumo de sustancias; déficit de servicios especializados en niñez, adolescencia y adultos mayores; dificultades en la formación de los profesionales que no están preparados para la prevención y tratamiento desde el nuevo paradigma; escaso desarrollo de investigaciones epidemiológicas, insuficiencias en los mecanismos de monitoreo y evaluación de la calidad de los servicios de Salud Mental; falencias en el desarrollo de dispositivos de asistencia en catástrofes y emergencias, entre otras.
Para hacer frente a estas carencias, e intentando dar respuestas a las diversas problemáticas, el Plan Nacional propone, entre otras acciones -se han fijado 31 metas de cumplimiento gradual hasta 2020: la difusión de derechos; creación de proyectos destinados a la promoción de la equidad, interculturalidad y perspectiva de género; aumento de la accesibilidad de servicios, dispositivos y actividades de salud de la población; creación de dispositivos comunitarios, servicios de salud mental en hospitales comunes; cierre en forma programada y gradual de los neuropsiquiátricos, y desarrollo de trabajo interdisciplinario, entre otras.
Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba