Tres de cada diez comercios registrados que hay en la provincia de Córdoba pertenecen al rubro de alimentos y bebidas. Ese sector atraviesa un amesetamiento, a raíz del “impacto que produce la suba sostenida de precios”, según develó ayer a EL DIARIO el secretario de Comercio de la provincia, Efraín Molina.
El funcionario llegó a las 13 a la sede de la Asociación Empresarios de la Región Centro Argentina (AERCA), para anunciar los Premios “Comercializá con el ejemplo” 2013, que se instrumentarán por primera vez en Córdoba.
En ese contexto, dialogó con este matutino y especificó que en Sistema de Información para el Fortalecimiento de la Actividad Comercial y de Servicios (Sifcos) hay “más de 70 mil comercios registrados” del territorio provincial.
El 30% de la oferta comercial pertenece al rubro alimentos y bebidas, seguido por indumentaria y calzado (un 12%) y autocomercialización de automotores, repuestos y accesorios, en el orden del 10% y 11% de la oferta, de acuerdo a los datos que brindó Molina.
Consultado sobre la situación actual del comercio, indicó que “está íntimamente vinculado y no escapa a los vaivenes lógicos del ciclo económico” y resaltó que “es tan amplio y heterogéneo el comercio minorista que la situación no impacta en todos por igual”.
Sí “hay una constante” -aclaró- que es la “merma en la rentabilidad” y explicó que se da por la suba “sistemática” de costos, por el factor salarial y por cuestiones cíclicas. Por ejemplo, acotó que con el Día de la Madre probablemente se visibilice un “pequeño envión” para las ventas en algunos espacios.
Puntualizó, ante la consulta periodística, que el rubro con mayor presencia en la oferta (alimentos y bebidas) sufre un amesetamiento en ventas. Y añadió que “es el que mayor gasto insume en un hogar tipo en Argentina, ya que entre el 30% y el 40% de los ingresos familiares se destina a éste”.
