El fin de semana pasado se llevó a cabo un festival integral de música en vivo, feria de discos y charlas alusivas en el Centro Cultural Comunitario Leonardo Favio.
La propuesta, titulada “AltoFest”, fue organizada por el sello Discos del Bosque y contó con la actuación de Candelaria Zamar, Hipnótica y la villamariense Rayos Láser (el viernes) y Cristóbal, Francisca y Los Exploradores, Juan Ingaramo y el crédito local De la Rivera (el sábado). A la vez, se brindaron paneles sobre la realización de videoclips (Julián Lona/Iván Pierotti) y acerca de la difusión musical y la escena rockera en Córdoba, a cargo de los periodistas Humprey Inzillo, de Rolling Stone, y José Heinz, de La Voz del Interior, quienes dialogaron con EL DIARIO.
José Heinz
Heinz indicó que "Villa María es un polo muy interesante para la música popular, dado que tiene mucha gente joven y una carrera universitaria con orientación a la música popular que ha generado una movida importante".
También asocia dicha realidad a "una plataforma como Discos del Bosque, que permite hacer algo en común entre distintas bandas que comparten una afinidad no sólo musical, sino humana. Hasta permite juntarse con artistas que no son de la ciudad, como Hipnótica de Río Tercero o Juan Ingaramo, que es cordobés, pero vive en Buenos Aires".
Estado y privados. "Siempre viene bien y es fundamental el aporte del Estado, dando incentivos o creando centros culturales, como el Centro Cultural Comunitario. Aunque también se requiere de la prensa para darle mayor visibilidad a la escena y que las empresas privadas también aporten, con bares y boliches, donde las bandas se sientan cómodas y tengan un cachet, aunque sea simbólico, para que se sientan valoradas".
Talento. "Pero al margen de esas condiciones, se necesita talento y en Villa María se nota que existe. Las bandas tienen una energía puesta en una clase de música muy popular, con mucha llegada a los adolescentes y con una calidad que sobresale. Es un movimiento que está un escalón por encima de lo que se puede encontrar en la provincia. Estas bandas son el futuro del rock nacional, cuyas estrellas se encuentran en una suerte de meseta creativa".
Buenos Aires. "Para una banda todavía es necesario Buenos Aires, en especial para mayor visibilidad y un nivel de profesionalismo más alto. Córdoba puede llegar a esos niveles, pero con una mayor inversión por parte del Estado y de los privados. Además, hay que entender que el público cordobés es más cuartetero y le falta tener un público rockero más cautivo".
Humprey Inzillo
Por su parte, Inzillo insistió en "el trabajo de las bandas a partir de una identidad propia. Más allá de las influencias que puedan recibir, no tienen que sonar como una banda de Londres". Y más allá de la propagación de sellos independientes (como apuntara a Mamboretá, instalado en la región de noreste), Inzillo remarca, casi en coincidencia con Heinz, el concepto de "colectivo de artistas que posibilitan una estética en común". En esa línea identifica a la plaza villamariense como una pata importante en la escena cordobesa.
Condiciones tecnológicas. "Actualmente se puede grabar en un estudio casero, con estándar de calidad muy alto y acceder a todas las músicas del mundo. Y a través de las redes se puede crear una relación directa con el público. Aunque los medios masivos continúan siendo importantes en la interpretación, divulgación y puesta en valor. Es cierto también que, al ser más fácil grabar, el nivel de calidad es variado".
Rolling Stone. "Si bien es un medio masivo, tiene una sección de discos que es recontra prolífica. No importa si es de un sello multinacional o independiente, si tiene edición física o sólo virtual, si es rock, folclore, tango, jazz u otro estilo. Hay que tener en cuenta que llegan por mes 100 discos y se reseñan 30 en promedio. Y no significa que lo que queda afuera es todo malo".