José René Vidal (foto), un ciudadano de Villa María, ex presidente de la Cooperadora del Hospital Pasteur, manifestó su enojo por el maltrato recibido por inspectores de tránsito.
Todo comenzó cuando quiso hacer el trámite para renovar el carné de conducir. En esa oportunidad, le indicaron que para otorgárselo, debía abonar cuatro multas, ninguna de ellas notificada, según expresó.
Una de las sanciones fue realizada el 21 de noviembre de 2008 en la costanera por no tener cinturón de seguridad. “Le cuento que hace 40 años que no voy en auto a la costanera, no entiendo cómo me pudieron hacer una multa en un lugar al que no fui”, dijo, a la par que aclaró que ninguna otra persona maneja su vehículo.
La segunda fue el 14 de junio de 2010, en Yrigoyen 531, “a la vuelta de mi casa. Dicen que no tenía el ITV, pero nunca me dieron una multa por eso”.
La tercera, por no abonar el estacionamiento medido en General Paz 55, labrada, según le dijeron en Tránsito, el 13 de septiembre de 2010; y la cuarta, del 3 de octubre de 2010, otra vez en Yrigoyen 531 por no contar con el ITV.
"Nunca pusieron una multa en mi parabrisas ni me llegó una carta a mi casa. Es más, nunca antes, cuando fui a renovar el carné, me hablaron de que tenía multas. Hace 70 años que manejo y jamás tuve un problema”, manifestó.
Pero lo peor vendría después. Cuando siguió con los reclamos para poder renovar el carné, ya había pasado unos días de vencido, salió de la dependencia municipal y los inspectores le revisaron la documentación. “Al ver que tenía el carné vencido, me lo rompieron en la cara y me quitaron el auto”, dijo.
“Retirar el vehículo me costó dos mil pesos. Quise hablar con funcionarios y me dijeron que mi ciclo había pasado. No se que me quieren decir, porque sigo manejando bien, respeto las normas de tránsito y cada año, como corresponde a mi edad, renuevo el carné de conducir. Este año me demoré por las trabas que ellos mismos me pusieron”, lamentó.
“Siento que no buscan otra cosa que recaudar”, señaló, a la par que explicó que con su magra jubilación de 1.700 pesos, “necesito movilizarme para hacer trabajos por mi cuenta, si no, de qué viviría”, concluyó.