El IPEM Nº 147 Manuel Anselmo Ocampo tiene actualmente más de 40 alumnos integrados.
“En este momento, tenemos en primer año un aula con siete alumnos sordos que están juntos por un pedido de la Escuela Especial Pablo Sexto de Villa Nueva y su anexo el IDA, de Villa María”, confirmó la vicedirectora de la institución, Matilde Norma Soleri, al dialogar con EL DIARIO.
“Nos explicaron las ventajas de que todos asistan al mismo curso. Nosotros lo hemos analizado bastante y finalmente acordamos que lo íbamos a hacer de ese modo. En este momento, tenemos compañeros de ellos que están aprendiendo la lengua de señas, por lo que así se pueden comunicar entre sí”, valoró y añadió que por ese intercambio fueron aprendiendo todos.
Para esto, hay una intérprete en todas las clases. “Hace la interpretación y de esta manera se puede concretar la integración”, indicó. Luego, subrayó que “estas cuatro docentes lo hacen apoyadas por algunas mutuales de los alumnos, pero no tienen ningún cargo y en eso la escuela está trabajando”.
“No son docentes de la Pablo Sexto, no son docentes sino intérpretes, por eso es difícil conseguir un cargo para ellas, pero estamos trabajando en ese sentido”, abundó la directiva.
Además, en otros cursos, por ejemplo en cuarto año, concurre un adolescente con “una discapacidad auditiva importante”, pero en este caso la integración se da sin docente.
Por su lado, la directora, Miriam López, precisó que en 2014 probablemente “tendremos en primer año otro grupo con las mismas condiciones, con el apoyo de intérpretes”.
López resaltó que “los chicos participan, con mucha voluntad y el apoyo de sus padres, de otros proyectos institucionales”, como el Himno Nacional argentino cantado con señas.
La vicedirectora, en tanto, añadió que el casi medio centenar de estudiantes integrados tiene “distintas necesidades especiales”.
“Hay adecuaciones curriculares significativas en más de 30 alumnos y el resto tiene adecuaciones curriculares no significativas”, especificó.
Cuentan con dos coordinadores de curso y una psicopedagoga que “trabajan específicamente en pos de la integración y la inclusión”.
Para todos y todas
“Este IPEM es una escuela que integra. El papá de un alumno con necesidades especiales no va a pedir por favor un lugar, va a anotar a su hijo y lo inscribimos como a cualquier otro alumno”, aseguró Soleri.
“Lo que hacemos es pedir documentación, que es necesaria y como se hace para cualquier niño. Nosotros queremos una escuela para todos a nivel de diversidad, a nivel inclusión. Hace ocho años que la institución abrió sus puertas en este aspecto y el número fue creciendo, de diez en ese entonces a más de 40, hoy”, puntualizó.
En tanto, la directora, elogió la actitud de los compañeros. “No vemos discriminación, sino una integración y comprensión por parte de los demás chicos”, declaró.
La vice abundó: “Si vos caminás por los pasillos de la escuela, difícilmente reconozcas a un alumno integrado, están tan integrados que no podés darte cuenta”.
Por un sueldo digno
Consultadas sobre la carencia de recursos, advirtieron que se necesitan “sueldos dignos” para las intérpretes. “En este momento no lo tienen; hay apoyo de mutuales, pero por ejemplo de siete alumnos, sólo hay dos mutuales que acompañan. No son apoyadas como corresponde”, concluyó.