Visiblemente enojadas, 11 personas que estaban en la asamblea de anoche se retiraron del auditorio antes de la votación de autoridades.
"Estamos de más", "esto no es democracia", dijeron al retirarse, sin querer detenerse ante los periodistas.
El único que hizo declaraciones a la prensa fue el letrado local y socio de la Sociedad Rural Villa María, Héctor Rubén Osés, quien presentó formalmente el pedido de impugnación rechazado. "Estos no pueden ser una comisión Directiva, son una banda de patoteros", indicó.
Los fundamentos por los que pidió la impugnación son varios y pasan por el cuestionamiento de la asamblea anterior, la de noviembre, en la que se eligió a la otra mitad de la comisión; hasta la convocatoria de la actual.
En relación a este último punto, advierte que entre los ítems del orden del día está el de "movimiento de socios". "Es una expresión dogmática que provoca, dada su imprecisión -que por sí la convierten en inentendible...- dudas sobre cuál es el tema o los temas a tratar en este punto", indica en el pedido de impugnación, remarcando que sí en ese punto está la expulsión de Gonzalo Rial Núñez, estarían afectando sus derechos dado que no sabe "cual o cuales son los motivos por los que puede resultar movido".
Al rechazar el pedido, Osés, junto a los otros socios disconformes, advirtieron que irán a la Justicia, por lo que el capítulo de la interna en la Rural aún no terminó.