La Justicia villamariense condenó ayer a dos hombres por un robo perpetrado a fines de julio del año pasado en una conocida industria local y ordenó la captura del tercer implicado en el hecho que, encontrándose en libertad, no compareció en la audiencia.
Gastón Jorge Castro (31) y José Gabriel Quinteros (45) recibieron penas de tres años de prisión de cumplimiento efectivo, con declaración de reincidencia, por el delito de “robo calificado por escalamiento” y continuarán en la cárcel hasta por lo menos fines de enero de 2015, fecha en la que podrán obtener la “libertad asistida”.
En tanto, se libró orden de detención de Carlos Alberto Saldaño (61), quien debía presentarse en la víspera para ser juzgado junto a sus compañeros de andanzas.
Los tres sujetos estaban acusados de haber sustraído dos maletines que contenían documentación de la empresa metalúrgica Banchio Hermanos SRL, ubicada en la esquina de avenida Perón y Aconquija de esta ciudad.
El atraco se produjo en horas de la madrugada del 27 de julio de 2012, cuando los delincuentes ingresaron al establecimiento fabril por el techo y con un soplete cortaron las rejas de una claraboya.
Cuando estaban en plena faena, se activó el sistema de alarma y los ladrones se dieron a la fuga en el vehículo utilitario con el que habían llegado, aunque dos de ellos, Castro y Quinteros, fueron interceptados momentos más tarde cuando escapaban corriendo por las inmediaciones de bulevar Sarmiento y San Martín.
Durante la investigación se determinó que el tercer integrante de la banda era Saldaño, quien fue detenido poco después, pero como carecía de antecedentes recuperó la libertad luego de algunas semanas. Distinta situación fue la de sus cómplices, quienes quedaron presos por registrar condenas por delitos contra la propiedad.
En la víspera, ambos convictos fueron defendidos por el abogado cordobés Simón Palacios. La audiencia fue presidida por el camarista René Gandarillas y contó con la participación del fiscal Francisco Márquez y de la secretaria Marcela Mattalía.
Finalmente, cabe señalar que Castro registra último domicilio en 25 de Mayo 1057 en barrio Rivadavia de Villa María, mientras que Quinteros y el prófugo Saldaño son oriundos de la capital provincial.