Dos cortadoras de césped, un microondas y un televisor fue lo que se llevaron los amigos de lo ajeno de la casa de un docente de esta ciudad, quien en ese momento no se encontraba en la vivienda y prefirió mantener en reserva su identidad.
El robo tuvo lugar el martes por la noche, en una vivienda de la calle Teniente Ibáñez al 2900, en el barrio Felipe Botta.
Los cacos ingresaron a la morada por el costado, saltando una tapia y violentando la puerta que da a la cocina y al living, amparados por la oscuridad, accedieron al interior. Revolvieron toda la casa, porque evidentemente buscaban dinero en efectivo, cosa que no había (¡es la casa de un docente, por favor!) y terminaron yéndose con lo que pudieron cargar.
Al costo de lo sustraído, claro, hay que agregarle los gastos de los daños materiales causados en las aberturas de aluminio.