Un gol al ángulo, de zurda, a los 2 minutos de juego, es acción típica de los artilleros desenfrenados o los jugadores mágicos y desequilibrantes. Pero Leandro Peñaloza también demostró el domingo que la definición soberbia puede ser obra de un central en alza que hace “desde los doce años que no marca un gol”, por más que su edad marque 22.
“Fácil, desde los doce años que no hago uno”, confesó el “Chachito”, con una gran sonrisa que delataba su felicidad no sólo por la conquista en cuestión, sino también porque Alumni ganó para salir de un mal momento y comenzar bien la era Marcelo Bonetto.
Así quedó concreto que la definición del defensor villamariense resultó fundamental porque abrió el partido y desnudó las flaquezas del vencido, Juventud Unida de San Luis.
Como el hijo bien futbolero del exitoso entrenador Jorge Peñaloza, Leandro siempre se rodeó de jugadores de diferentes edades.
Cuando militaba en el baby, el ahora central de Alumni acompañaba al “Chacho” cada vez que este iba a practicar con el histórico plantel que tuvo Yrigoyen en el orden nacional.
Por entonces, el “Pato” Bomprezzi, el “Beto” Arenas, el “Nano” Schiavi, el “Gringo” Róvere y otros tantos integrantes de aquel plantel tiopujiense, cuidaban al pibito y lo cargaban con un apodo: “Casi gol, porque siempre venía de los partidos o las prácticas y decía ‘casi hago un gol”, recordaban los protagonistas.
Claro que Leandro no estaba para esas cosas. Su cualidades defensivas y elegancia para salir jugando lo tenían como una promesa interesante, a tal punto que papá técnico, curtido del ambiente futbolero, descartó propuestas para que se lo llevaran de muy chico.
De todas maneras, finalmente lo convenció nada menos que River Plate, donde “Chachito” se mantuvo en las divisiones inferiores hasta que resolvió pegar la vuelta. No obstante, Peñaloza fue tentado para jugar en Talleres y allí anduvo, aunque por la división reserva, hasta que Alumni lo repatrió en esta temporada.
Tras un arranque dubitativo, Peñaloza no se amilanó, esperó su tiempo y hoy lleva dos partidos al hilo con un nivel interesante, tanto sea con Mauricio Magistretti o Marcelo Bonetto, y en un torneo superior de aquel Yrigoyen que dirigía su padre.
Más allá de esto, Peñaloza sigue pensando en el presente grupal y, en ese sentido, el domingo afirmó que “la victoria fue muy importante por la semana problemática” que tuvo el plantel.
“Además, es mejor arrancar este nuevo proceso con una victoria porque así nos fortalecemos en lo anímico”, agregó.
En cuanto al nivel de juego, Peñaloza comentó que “hubo errores, pero lo importante que el equipo tuvo actitud y por momentos intentó jugar, aunque a medida que pasen las prácticas nos iremos acoplando a lo que quiere el nuevo técnico”.

s Bocha
de esperanza

Raúl Maldonado, uno de los jugadores con más experiencia en el equipo, también resaltó la importancia del triunfo y no dudó en decir que “la llegada de Marcelo Bonetto nos llena de esperanza”.
A la hora de analizar lo que pasó el domingo, el “Bocha” comentó que salió “un partido muy cambiante, donde por momentos jugamos bien nosotros, como en el inicio y en parte del segundo tiempo, y por momentos ellos hicieron las cosas mejor”.
Luego Maldonado aseguró: “La llegada de Marcelo Bonetto nos llena de esperanzas a todos”, y comentó: “Yo nunca lo tuve como técnico, pero me comentaron que es un DT muy trabajador y que le gusta ir al frente”.
Además, el ex Instituto y Belgrano también tuvo unas palabras con respecto a la partida de Mauricio Magistretti: “Yo lo entiendo porque cuando existen problemas familiares tenés que dejar de lado lo futbolístico; así que de mi parte lo felicito y lo apoyo porque con nosotros se portó muy bien”.
Si bien desde que volvió al club todavía no mostró todo lo que sabe, Maldonado comentó: “Empecé el año lesionado y poco a poco estoy sintiéndome mejor, pero el ‘profe’ (Paulo Garletti) sabe el trabajo que tenemos que hacer”.
Otro de los protagonistas que habló fue Diego Villagra, quien coincidió con todos en destacar “la importancia de la victoria por los días tormentosos que vivimos”.
El “Pulga” destacó: “Merecimos largamente el triunfo por el trabajo que realizamos; ellos intentaban con su centro delantero que era muy fuerte, pero lo pudimos controlar”.
Villagra también fue consiente que Alumni tiene que mejorar de visitante: “Hay que sumar puntos gordos afuera porque todavía estamos con posibilidades intactas de continuar en la próxima ronda, es nuestra falencia, pero creo que Marcelo (Bonetto) lo va a poder modificar”.
Para finalizar, el defensor tuvo unas palabras alusivas a sus compañeros: “Esta victoria se la dedico a los jugadores que pusieron todo y a mis familiares. Fue una victoria nuestra”, redondeó.