La fuente de trabajo de un centenar de familias de La Laguna y localidades vecinas pende de un hilo. La dramática situación se puso de manifiesto en la mañana de ayer, cuando los trabajadores de Agromaní concurrieron a cumplir con su tarea y se encontraron con las puertas del establecimiento cerradas.
Además, la empresa no se presentó a una audiencia que debía celebrarse en horas de la mañana en la sede del Ministerio de Trabajo de la Provincia con los representantes la Unión Argentina de Trabajadores Rurales, que tiene 60 afiliados en el establecimiento, y del centro de Empleados de Comercio, que cuenta con otros 40.
El secretario general de esta última entidad, Mario García, dijo a Radio Show que ya habían despachado un telegrama solicitando a la patronal que aclarara la situación.
El también concejal villamariense dijo, además, que la sede local de la cartera laboral había convocado a una nueva audiencia para el miércoles próximo en su sede de calle Corrientes.
“De momento le recomendamos a los compañeros que sigan concurriendo al lugar de trabajo al menos hasta el miércoles, a fin de que no pueda invocarse el abandono de tareas”, añadió.
Mientras tanto, La Laguna era recorrida por olas de rumores que iban desde el despacho masivo de telegramas de despido a la totalidad de la plantilla, hasta lo que se considera un “apriete” a los gobiernos de la provincia de Córdoba y de la Nación “para obtener algún tipo de rédito”.