Escribe: Alexis Zegatti
En la calurosa tarde ticinense, Atlético consiguió revertir la llave en tan sólo nueve minutos de fútbol que le permitieron hilvanar una gran victoria jugando, por momentos, a alto nivel. Goleó a Española por 4 a 0 (4-2 en el global), lo que le permitió avanzar a semifinales y ahora deberá enfrentar a 9 de Julio de Pasco, en el clásico regional.
En la serie, fue un partido para cada uno, pero Ticino fue más a lo largo de los 180 minutos. Desde el primer minuto se jugó del lado de la visita, intentando por todos lados. Sin embargo, el “Gallego” ejercía una buena presión en la salida con Marín a la cabeza y eso complicaba a los locales.
Pese a ello, al minuto Coria se lo perdió debajo del arco. De ahí en más, el partido fue pedir de la visita porque era trabado y el Atlético no llevaba peligro. Ahí fue clave Andrada, porque el experimentado volante contenía el nerviosismo de sus compañeros. Hasta que a los 29’ Carranza por afuera llegó al fondo y envió un centro que no pudo conectar Andrada ni Manzanares.
Dos minutos después llegó una ráfaga de goles del anfitrión que ahogó y dejó KO a su rival. En una acción calcada, Carranza desbordó a Arce y envió un centro, Andrada se tiró, pero no la tocó y por detrás Racca se chocó el balón: 1 a 0.
A los 35’ Damiani recibió cerca del circulo central, levantó la cabeza y vio la corrida de Manzanares, allá fue el pelotazo. El ex-Española le ganó a Tejeda y envió un centro para el ingreso de Andrada, quien definió desde el punto de penal para el 2 a 0.
En medio de esto, Española avisó, tras una apilada de Sarmiento. Pero inmediatamente llegó otro golpe, el tercero. Otra vez por izquierda, en esta ocasión frotó la zurda Páez y desarmó a la defensa. Centro pasado para Manzanares, el pibe levantó la cabeza y cedió para Coria y “Manu” giró y, de zurda, fusiló a Arcas: 3 a 0.
En el complemento, Ticino salió de igual manera, mientras que Española no lograba reaccionar y los nervios cada vez eran mayores. Dejando espacios, a Ticino se le hizo mas fácil. A los 6’ increíblemente Banegas (a instancias del asistente) le anuló un golazo a Coria (previo centro de Andrada), quien de cabeza la clavó al ángulo.
Minutos después, Banegas (y el mismo asistente) obvió un claro penal de Racca sobre Manzanares, quien le ganaba la posición, y lo tomó de la camiseta. En medio del nerviosismo y de la imprecisión, Marín le entró duro a Bianchi y el mediocampista, de lo mejor de la visita, vio la roja.
La goleada la coronó uno de los mejores del campo de juego, Joel Manzanares. El ex-Española recibió un gran pase de Bianchi y definió sobre la humanidad de un Arcas ya vencido. 4 a 0.
Luego se dio la expulsión de Tejeda, que tras una falta (al parecer) habló de más y alguna posibilidad de descontar de Española en los pies de Morello o en algún tiro de esquina en el que Racca no logró conectar correctamente.
No quedaron dudas, Ticino le agregó experiencia al fútbol y fue vital para la remontada. Española dejó una buena imagen, pero le faltó creer que podía ser semifinalista. La imagen del final, con los jugadores respondiendo con agresiones la cargada del público local, no empaña igualmente la buena campaña que Brusa y sus dirigidos lograron en estos dos campeonatos.
La figura
Claudio Andrada: La experiencia de “Pele” fue vital en un partido que estaba cuesta abajo. Un gol y muchas palabras para tranquilizar a sus compañeros cuando estaban en desventaja. Gran partido de Manzanares por derecha.
El árbitro
Pésimo arbitraje de Hugo Banegas. Se le escapó el partido de las manos, lejos de las jugadas y mal parado; en los primeros minutos Arcas hizo el tiempo que quiso; en la segunda parte, con la ventaja del local, Rodríguez hizo lo propio. No cobró dos penales increíbles. Sus asistentes no desentonaron.
