En otros dos juicios abreviados, la Justicia de Villa María condenó a un par de jóvenes por diferentes hechos delictivos.
En la primera audiencia, Daniel Alberto Marcelloni fue declarado autor de “suministro gratuito de estupefacientes en grado de tentativa”, agravado por tratarse de un instituto carcelario, y se le impuso una condena de tres años de prisión de ejecución condicional.
Marcelloni, un villanovense de 25 años de edad, confesó que al ir a visitar a un amigo que está alojado en el Establecimiento Penitenciario Nº 5, quiso ingresar cocaína y para ello la almacenó en dos pequeños sachés termosellados que ocultó en el interior de una de sus zapatillas y en una cavidad corporal.
Durante la requisa, los agentes carcelarios encontraron el primero de los envoltorios y luego el joven sufrió una descompostura. Fue así que se logró establecer que llevaba otro saché similar escondido en el recto.
El joven compareció en libertad y pudo mantener ese estado gracias a que la pena fue en suspenso y no superó los tres años.
En el otro juicio, Víctor Hugo Torres recibió una condena de tres meses de prisión efectiva, que fue unificada en dos años con otra sanción penal que tenía pendiente.
Torres, alias “Halcón”, de 22 años y domiciliado en Las Perdices, fue hallado culpable de un hecho de “robo calificado” por la participación de un menor en un atraco perpetrado en octubre de 2012 en un maxiquiosco de aquella localidad, de donde se llevaron tarjetas telefónicas, cigarrillos y otros elementos luego de romper un tejido tipo mosquitero.
El joven convicto está en situación legal de pedir la “libertad condicional”, pero como tiene pésima conducta en la cárcel, se le denegará el beneficio excarcelatorio y lo más probable es que tenga que completar los dos años de prisión, hasta mediados de octubre de 2014.