Señor director:
Esta es una opinión sobre el escrito por el presbítero Amado Aguirre (sacerdote, doctor en Leyes y licenciado en Letras) publicado en EL DIARIO el miércoles 23 de enero de 2009.
Este es un sacerdote que ha perdido la fe. Recemos por él, por haber sido elegido y no ser fiel a la Iglesia que lo formó.
Se transformó en ese sacerdote mediático para contrarrestar que no la “yuga” como otros sacerdotes fieles que se la juegan por Cristo y la Iglesia.
Tal vez, este padre por su edad, aunque hace rato que molesta con sus escritos, sufra las consecuencias de una enfermedad senil.
Uno de los argumentos usados, que se refieren al casamiento de San José y María, puede ser rebatido por un niño con el Catecismo de las 93 preguntas.
En definitiva, el padre Aguirre nunca aceptó una Parroquia porque había que laburar y es más fácil hacerse famoso y contestatario con temas que les interesa a los “juntados” y también a personas como él, sin fe.

P.A.P.
CI 34277798