La escuela del barrio San Martín comenzó con inconvenientes en el servicio de gas hace unos 45 días, cuando Ecogas detectó una pérdida y procedió al corte por protocolo. A pesar de esta falla siguen aportando el desayuno, almuerzo y merienda que les envía el Paicor.
La situación es difícil de resolver porque si bien los docentes recaudaron dinero para pagar a un gasista matriculado que encuentre la pérdida y están comprando algunos materiales, la reparación depende de la Oficina de Infraestructura de la provincia de Córdoba. Los directivos elevaron un reclamo a esta dependencia, quienes se acercaron hace una semana a la institución diciendo desconocer el inconveniente, pero que intentarán buscar una respuesta para la semana próximo. La preocupación de la vicedirectora de la escuela, Ida Rosa Mansilla, está dada por encontrar una solución antes del receso escolar. Esto se debe a que si bien las instalaciones permanecerán abiertas con guardias pasivas durante el mes de enero, pone en duda que vengan representantes de Infraestructura con un gasista, ya que ellos no cubren ese servicio.
El problema es complejo porque este tipo de instituciones, del plan provincial de escuelas, no cuentan con planos por lo que ante la detección de la falla habría obtenerlos para luego renovar todo el sistema de cañerías y colocar elementos de ventilación, que provisoriamente fueron instalados por los docentes.
La comida está asegurada
Desde la dirección del IPET Nº 56 se contactaron con los miembros del Gobierno provincial a cargo del Programa de Asistencia Integral de Córdoba (Paicor) para comunicarles la situación y pedir ayuda provisoria. El programa encargado de distribuir alimentos para el almuerzo de los niños en las instituciones les proveyó una garrafa para conectar a un anafe que consiguieron los docentes. Aquí el problema se presenta al momento de brindar “la leche” de la mañana y la tarde, que reciben 100 alumnos. En tanto, el almuerzo ya llega caliente al colegio.
Ida Rosa Mansilla agrega “en este momento, tenemos un aula inutilizada porque allí se rompió la pared para detectar la pérdida. Además, por más que el Paicor trae la comida caliente, a la leche en polvo necesitamos prepararla con agua hervida por eso improvisamos con el anafe que es de la especialidad Industria de los Alimentos, esperemos que si se termina esta garrafa, nos manden otra”.
Por último, cuando se le consulto si habían pedido colaboración al gremio docente UEPC, la vicedirectora de la escuela pública respondió que desconfía de la solidaridad de los compañeros.
Otra escuela, el mismo reclamo
La escuela primaria Justo José de Urquiza de barrio Mariano Moreno se encuentra en la misma situación, es decir, con corte de gas y aguardan una respuesta. Allí también recurrieron al Paicor desde donde les informaron que al menos hasta finalizar el ciclo estarán aseguradas las raciones correspondientes a todos los alumnos que asisten a la institución.
